"Para todas las personas que hicimos Tasio, este acto es una celebración muy especial y emotiva por todo lo que significa estar en el mismo festival en que se estrenó hace 40 años”. El realizador Montxo Armendáriz, figura indispensable del cine vasco, ha recogido este sábado el Premio de la Filmoteca Vasca de manos de su director, Joxean Fernández, antes de la proyección en el teatro Victoria Eugenia de la versión restaurada en 4K de la ópera prima del cineasta navarro, que ha servido de inauguración de la sección Klasikoak que organiza la cinemateca en conjunto con el Zinemaldia.
La primera vez que se presentó Tasio en este certamen fue en 1984. Compitió en la Sección Oficial y se hizo con el segundo premio de la crítica. Fue una película producida por el hernaniarra Elías Querejeta, a quien Armendáriz ha recordado en su discurso, y que pudo ser posible gracias a una ayuda económica del Gobierno Vasco. También ha tenido un recuerdo para el carbonero real en el que se inspiró para el personaje que interpretaría Patxi Bisquert: Anastasio Ochoa.
Aunque el realizador ya había filmado para entonces algunos cortos documentales, no se había lanzado a rodar un largometraje de ficción. Ante el público del teatro ha reconocido que durante el rodaje estaba “bastante asustado ante el lío” en el que se había metido, dado que el ahora consagrado cineasta no contaba entonces con ninguna formación cinematográfica. “Yo no había estudiado cine”. Lo que hizo fue apoyarse en aquellos que le acompañaron en aquel viaje. “Buena parte del mérito de que Tasio haya llegado hasta aquí le corresponde a todo el equipo técnico y artístico que se volcaron en la película y me ayudaron a que fuera lo que es. Sin su entrega y profesionalidad, estoy convencido de que el resultado no hubiera sido el mismo”, ha agradecido desde el estrado.
En el palco de honor se encontraba parte del elenco: Patxi Bisquert, Amaia Lasa, Amaia Merino, Garikoitz Mendigutxia, Elena Uriz, Isidoro Fernández y Paco Sagarzazu. La conmemoración del 40º aniversario de la película, ha seguido Armendáriz, les ha servido para volverse a encontrar y para montar un grupo de WhatsApp que les ha permitido “intercambiar recuerdos entrañables y compartir la alegría que significa este renacimiento de Tasio”, que tuvo su primer visionado público en la sección Cannes Classics. Tras su reestreno en Donostia, el equipo de la película ha recibido una sonada ovación por parte de los asistentes.
Película “fundacional”
Joxean Fernández, por su parte, ha refrendado la voluntad de la Filmoteca Vasca de recuperar y restaurar clásicos del cine vasco. No podían comenzar este proceso con ninguna otra película que no fuese Tasio, una cinta “fundamental” para la historia de la cinematografía vasca y “de una calidad cinematográfica universal”.
De esta manera, el director de la cinemateca ha explicado que al inicio del proceso de renovación, comprobaron que no tenían ninguna copia en buen estado en soporte fotoquímico y que las versiones digitales se habían degradado. Finalmente, con el apoyo económico del Gobierno Vasco y el permiso de Mercury Films, pudieron llevar la película al laboratorio L’immagine Ritrovata de Bolonia, uno de los más prestigiosos del mundo.
Sesión concurrida
Han sido muchos los que han querido asistir al renacimiento de Tasio. Tanto es así que apenas quedaban butacas libres durante la sesión.
Asimismo, el pase en el Victoria Eugenia también ha tenido una presencia institucional destacada. Entre los asistentes se encontraban la vicelehendakari primera y consejera de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco, Ibone Bengoetxea; el viceconsejero de Cultura del Gobierno Vasco, Andoni Iturbe; la consejera de Cultura, Deporte y Turismo del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola; la directora del Instituto Etxepare, Irene Larraza; los escritores Edurne Portela, Jesús Ovejero y Luisa Etxenike, y el cineasta Oskar Alegría, entre otros.
