Entrado el año nuevo, la rutina ya ha vuelto a los hogares y a la vida en general. Son muchos los menores que en estos días se acercan al mundo de las pantallas a través de un dispositivo propio. Y lo hacen con todo lo bueno y lo malo, con los beneficios y los riesgos que conlleva.

Este es un tema que preocupa mucho a los padres, conscientes de no solo lo que puede acechar al otro lado de la pantalla, sino de cómo puede afectar a su salud, a su desarrollo y a sus relaciones sociales.

Parte de la solución pasa por la educación, por enseñar a los más pequeños a usar con cabeza estos aparatos, a adquirir hábitos correctos para aprovecharlos y disfrutarlos sin perjuicios. Y una cosa que tienen que tener claro educadores y padres es que el ejemplo real que se ofrece enseña tanto como consejos y controles.

Los padres deben interesarse activamente en el uso que sus hijos hacen de las pantallas. Freepik

Los consejos

El psicólogo Alberto Soler, especializado en crianza y educación, divulgador y autor de los libros Hijos y padres felices. Cómo disfrutar la crianza, Niños sin etiquetas y Tengo miedo, ofrece 10 claves para educar a los menores en un uso responsable de las pantallas. Y quizá los mayores también puedan aplicarlo para poder tener una relación más sana y menos dependiente con el móvil:

1. Las pantallas, cuanto más tarde, mejor. Con menos de dos años, la exposición a pantallas no debe existir. Hay una importante asociación entre la exposición temprana y problemas en el desarrollo del lenguaje, desarrollo cognitivo más lento, peores resultados académicos o un mayor riesgo de TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad). Después, tampoco hay que tener prisa por introducir las tecnologías a edades tempranas, se puede esperar algunos años más. Los dispositivos y sus interfaces son tan intuitivos que niñas y niños aprenderán rápidamente a usarlos sin problema.

2. En la mesa, sin pantallas. El tiempo de la comida es para la familia, hay que evitar las distracciones. Ni móviles, ni tablets, ni televisión. Y esto va también para los adultos, cuyo ejemplo también es importante. Se deben evitar las distracciones en el tiempo de las comidas. Este concepto de espacio sin pantalla debe extenderse a la televisión en el dormitorio infantil. Se ha demostrado una tele en su habitación predispone a desarrollar sobrepeso, dormir menos horas o desarrollar TDAH.

3. Zona única para recargar dispositivos. Los teléfonos móviles, tablets y ordenadores portátiles se deberían cargar siempre en una zona concreta, nunca en el dormitorio. Así se protege la zona de descanso y estudio de distracciones innecesarias.

4. Poner una hora para dejar de usar dispositivos. Establecer una hora en que toda la familia deje de usar lo móviles o las tablets, padres incluidos. Es un rato para la familia antes de dormir y que sirve de transición.

5. Evitar la exposición a pantallas antes de ir a dormir. Puede ir unido a la anterior. La luz de las pantallas activa mucho el cerebro y dificulta la transición hacia el descanso. Esto es especialmente importante en el caso de niñas y niños pequeños, ya que interfiere en la cantidad y la calidad de su sueño.

6. Usar el modo avión. Este consejo es para los progenitores. Cuando se quiera dedicar tiempo a los hijos e hijas, poner el teléfono en modo avión para evitar las distracciones. Las pantallas desvían nuestra atención y de este modo baja tanto la calidad como la cantidad de la comunicación familiar.

7. Apaga cualquier dispositivo que no se utilice. Esto también implica efectos negativos para el desarrollo cognitivo de los pequeños de la casa por el efecto de distracción que supone tanto para ellos como para personas adultas.

8. ¿Cuándo dar el primer teléfono móvil? Sabemos que el acceso al primer móvil es cada vez más temprano. La mayoría de expertos recomiendan los 14 años como el momento más adecuado, y recalcan que en todo caso, nunca sea antes de que el menor tenga 12. Además debe ir acompañado de un contrato familiar acordado por todos en el que se establezcan las condiciones y normas de uso del dispositivo.

9. Cuidado con lo que se sube a las redes sociales. También es un consejo para los progenitores, incluso especialmente para ellos: evitar compartir imágenes de los hijos en las redes sociales, especialmente aquellas en las que se les pueda reconocer o que se identifique algún lugar que frecuenten. Así será más fácil enseñarles después que tengan cuidado con lo que suban, que sean conscientes de la importancia de la protección de su intimidad.

10. Fomentar actividades que no impliquen dispositivos digitales. Deporte, excursiones, juegos de mesa, lectura, etc. Se trata de evitar que los dispositivos digitales desplacen o anulen otras actividades que son de gran importancia para el desarrollo.

Principales ciberamenazas para los menores

La empresa de ciberseguridad Kaspersky, en su informe Estar en línea: niños y padres en Internet analiza cuales son las principales amenazas que los menores pueden encontrase en el mundo digital. Se trata de conocerlas para que los menores no sean ni victimas ni agresores.

Ciberbullying. Consiste en el acoso perpetrado a través de Internet, con mensajes, vídeos o fotos que atentan contra su integridad enviados a la víctima y compartidos entre varias personas. Para evitarlo es importante educar a los menores en un uso respetuoso de la red, así como explicar a los niños la importancia de pedir ayuda a un adulto en caso de que esté siendo víctima de ciberbullying.

Phishing. Consiste en hacerse pasar por una empresa para robar datos, contraseñas o números de tarjetas de crédito u otra información. Si para adultos simulan bancos u otras organizaciones, para los menores pueden ser entornos de juegos online como, por ejemplo, Roblox o Minecraft.

Malware. Es un tipo de software que está diseñado para provocar daños en los equipos y sistemas informáticos. Es habitual que se instale en el dispositivo de la víctima a través de ataques de phishing, escondidos en archivos maliciosos adjuntos a un link fraudulento o al descargar alguna aplicación o juego. Los menores son más susceptibles de descargarlo, ya que les resulta difícil diferenciar una web o enlace fraudulento de uno real.

Grooming. Se denomina grooming a aquella acción en la que un adulto inicia una comunicación online con un menor con el objetivo de ganar su confianza y establecer una relación emocional. Es una situación que genera gran angustia en la víctima y que puede acarrear problemas de salud mental como depresión o ansiedad.

Happy slapping.Variante del ciberbullying en la que los agresores publican y comparten imágenes de la víctima siendo agredida y con el fin de agravar el daño realizado. El Código Penal español contempla penas para quienes difundan vídeos que menoscaben la dignidad de las personas que aparezcan en el mismo, como en casos de bulliyng.