Los lujos del Valencia Basket

No era ningún secreto que la presente iba a ser la Euroliga más dura de la historia. Con la ampliación a 20 participantes y la novedad de la participación de dos clubes con recursos casi ilimitados como el Dubái Basketball y el Hapoel Tel Aviv, iba a ser necesario contar con plantillas profundas para poder soportar el infernal ritmo de la competición, más aún si los fines de semana se compite en la liga doméstica más exigente de Europa como es la ACB.

El Valencia Basket, que visitará el Fernando Buesa Arena este domingo, es el mejor ejemplo de la ventaja que supone contar con un amplio fondo de armario. Las dificultades que acarrea gestionar una plantilla larga, que las está viviendo en sus carnes el exbaskonista Pedro Martínez con Sergio de Larrea, se ven compensadas con creces por los beneficios de poder gestionar los esfuerzos de los referentes del equipo en favor de sustitutos de plenas garantías.

El conjunto taronja, con un presupuesto a la altura de los grandes transatlánticos del continente gracias a las potentes inversiones a fondo perdido de su propietario Juan Roig, ha querido esta temporada celebrar su regreso a la Euroliga y estrenar su moderno pabellón, el Roig Arena, por todo lo alto. La dirección deportiva no escatimó en gastos en la conformación del equipo en verano y diseñó una plantilla con 16 jugadores de primer nivel, todos ellos válidos para competir tanto en la Euroliga como en la ACB.

Darius Thompson, Jean Montero, Omari Moore, Sergio de Larrea, Brancou Badio, Josep Puerto, Isaac Nogués, Kameron Taylor, Xabier López-Arostegui, Nathan Reuvers, Nate Sestina, Braxton Key, Jaime Pradilla, Matt Costello, Neal Sako y Yankuba Sima formaron el plantel de Pedro Martínez en un primer momento, sin contar la posibilidad de recurrir a canteranos inscritos en la Euroliga como Tomas Talcis, Alex Blanco y Jorge Carot, cuya participación ha sido innecesaria con tantos jugadores por delante.

Por si fuera poco, el club recurrió en momentos de acumulación de lesionados a refuerzos temporales como Ike Iroegbu y Vincent Valerio-Bodon. Un auténtico lujo. Con una plantilla de este calibre no resulta ninguna sorpresa que el Valencia Basket lidere actualmente la ACB con 7 victorias y 1 derrota y esté a una victoria del líder de la Euroliga con un balance de 9-5. 

Descartes de primer nivel

El hecho de que Nate Sestina, un jugador que disputó 35 encuentros de Euroliga con el Fenerbahce en el curso 2023-24 y que ahora mismo se encuentra dentro de la rotación del Armani Milán, se quedara sin sitio en la plantilla y fuera el sacrificado para aligerarla habla del nivel del fondo de armario del Valencia Basket.

Lo mismo sucede con el caso de Sergio de Larrea. El base titular de la selección española el pasado Eurobasket, MVP de la Supercopa ganada por el Valencia y una de las grandes promesas del baloncesto nacional está siendo descartado recurrentemente por Pedro Martínez en los encuentros de Euroliga, competición en la que Braxton Key, uno de los dos extracomunitarios del equipo, y Xabi López-Arostegui tampoco están teniendo demasiado protagonismo.

De hecho, Pedro Martínez ya ha sido cuestionado en varias ocasiones por la prensa sobre el minutaje de Sergio de Larrea, director de juego por quien suspiraría cualquier equipo de la ACB y que no tiene sitio en las convocatorias del Valencia Basket. No es casualidad que se explayara extensamente sobre la situación del jugador.

“Dedicamos muchísimas horas a decidir qué jugadores se quedan fuera y tenemos un debate muy grande a nivel interno porque es una decisión muy difícil y en la que hay muchísimos factores a valorar, no sólo el físico. Lo que no podemos hacer es ser injustos. Si todos los jugadores están entrenando bien, al final hay que tomar decisiones y no queremos ir haciendo zapping con ellos. Conocemos a los jugadores un poco y sabemos que hay algunos que necesitan tener un poco más de continuidad y a veces hacemos sacrificios y tomamos decisiones pensando en el bien común, no pensando en el bien de un jugador en particular aunque queremos, y en el caso de Larry porque es un chico joven también, que las cosas vayan lo mejor posible y le queremos ayudar. Pero tenemos responsabilidad con todos”, defendió.

La situación del técnico catalán no es fácil. “Si no tenemos lesiones, es más un problema que una ventaja. Tenemos que tomar decisiones que gente, a lo mejor, malpensada, puede pensar que son por dar un toque al jugador”, argumentó. Sin embargo, seguro que Paolo Galbiati, que lleva toda la temporada lidiando con distintos problemas de sus jugadores y ha tenido que recurrir a canteranos como Stefan Joksimovic, Vit Hrabar o Joseba Querejeta y al refuerzo temporal de Kobi Simmons para completar sus convocatorias, se pondría gustosamente en su lugar. Bendito problema para el Valencia Basket.