Vitoria. El verano se anticipaba sinuoso en el Buesa Arena cuando el Baskonia optó por mantener impertérrita su confianza en Dusko Ivanovic y perfilar una limpia en el vestuario para cincelar una plantilla más acorde a la filosofía de juego del entrenador montenegrino. La venta de Stanko Barac al Efes Pilsen por 1,2 millones de euros no fue sino el pistoletazo de salida para la recomposición de un puzzle que ayer vio cómo una de sus grandes piezas caía apenas siete meses después de su llegada.
En una operación relámpago de la que ambas partes salen beneficiadas, la entidad vitoriana optó ayer por rescindir el contrato del díscolo pívot uruguayo, que hará compañía a Barac en el Anadolu Efes tras firmar un contrato para las tres próximas temporadas. Batista no deja dinero en las arcas baskonistas, a pesar de que hace apenas medio año fichó al poste por medio millón de euros. Con todo, en el Buesa entienden que, dada la situación, su rescisión es una buena noticia para el equipo vitoriano, que se ahorra al menos desembolsar las tres altísimas fichas anuales que el jugador tenía selladas en su acuerdo.
El férreo no de Esteban Batista a reducir sus emolumentos fue la gota que finalmente ha colmado un vaso que el poste nacido en Montevideo había dejado a punto de desbordar con una actitud que no gustaba nada en el seno del Caja Laboral. Por una vez, el carácter innato de los jugadores sudamericanos -siempre queridos en el pabellón de Zurbano- pareció encontrar en Batista la excepción que confirma la regla. El uruguayo, que ya ha viajado a Estambul para pasar reconocimiento médico, pone punto final a su corta y desastrosa etapa en el Caja Laboral, en la que no logró hallar la sintonía necesaria con club y afición ni dentro ni fuera de las canchas. En Vitoria nadie lloró ayer su marcha.
Dos postes en nómina Pero el hueco que deja Batista no tardará en ser cubierto, al menos si el Baskonia es capaz de llegar a un acuerdo definitivo con el Efes para hacerse con los servicios del que sin lugar a dudas es uno de los grandes objetos de deseo baskonistas de los últimos años. Miroslav Raduljica, el pívot propiedad del club otomano cuyo nombre puso el club vitoriano sobre la mesa en las conversaciones para traspasar a Barac, ocupa el lugar más alto en la lista de preferencias para acompañar a Maciej Lampe en la dupla de cincos del Caja Laboral. Hace apenas un par de semanas, ambos clubes optaron por dejar al serbio fuera de la operación Barac, pero según confirmó ayer a este periódico Engin Ozerhun, manager general del Efes, la entidad vitoriana ha vuelto a la carga con más fuerza que nunca.
"El Baskonia está muy interesado en Raduljica, pero todavía seguimos con las negociaciones. Nos mostraron su interés desde un principio y por el momento continuamos hablando", aseguró Ozerhun. Por su parte, el agente del prometedor center balcánico, que matizó que aún no tienen una oferta formal del cuadro vitoriano, aseguró que Raduljica no descarta cambiar de aires a pesar de que apenas ha tenido oportunidad de jugar en su primer curso en Estambul. Una lesión lastró sus primeros meses de competición. Ya recuperado, mediada la temporada el Efes optó por cederlo al Alba de Berlín, donde cuajó un buen final de campaña haciéndose incluso con el MVP de la última jornada.
Compañero del alero baskonista Nemanja Bjelica en la selección de Serbia, Raduljica ha optado sin embargo por renunciar a formar parte del combinado dirigido por Dusan Ivkovic para poder recuperarse completamente de sus problemas físicos en lugar de estar presente en el Europeo de Lituania. Una decisión que sorprendió a muchos de sus compatriotas.
Por el momento, la marcha de Batista obliga al Caja Laboral a continuar con la caza y captura de dos interiores para completar la batería azulgrana en la pintura, aunque el intenso lavado de cara también se extenderá más allá de la zona. Con el capitán Mirza Teletovic y el recién llegado Maciej Lampe como únicas referencias bajo el aro a día de hoy, el club vitoriano escudriña el mercado sin prisa pero sin pausa. Aunque, como ayer confirmó el manager del Efes, los contactos entre ambos equipos aún pueden dilatarse en el tiempo, reclutar a Raduljica -que el verano pasado se decantó por el suculento contrato de cinco temporadas que le ofreció el cuadro turco- es la opción que más atrae en el seno de la entidad baskonista, todo dependerá de que el Baskonia, que cuenta ahora con una buena cantidad de dinero en su caja fuerte, y el Efes lleguen a un acuerdo económico para su traspaso.