Paso de gigante en el derbi (59-74)

Maloste ha acogido este domingo un partido decisivo entre Gernika y Araski. Un encuentro donde las alavesas buscarían la victoria para seguir en la lucha por la permanencia. Y las vizcaínas, volver a la senda de la victoria, tras dos partidos consecutivos cayendo derrotado.

Pues bien, por segunda temporada consecutiva, el Araski se llevó un triunfo heroico. Esta vez, no hizo falta prórroga como la pasada campaña para lograr una balsámica victoria, tras dos derrotas consecutivas que les permiten mantenerse fuera del descenso.

Fue una jornada en la que todos sus rivales directos vencieron, ya que el IDK Euskotren había ganado el sábado al Ardoi en la prórroga por 81-74 y el Celta al Gran Canaria tras otro thriller (51-50).

En Gernika, las de Madelen Urieta sacaron su mejor versión en un gran ejercicio de defensa complementada en ataque, con estiletes como Hill, Lisowa-Mbaka y Brewer, pero sobre todo una excelsa Hermida con 22 puntos. Con una rotación de ocho jugadores por la baja de última hora de Bethy Mununga debido a un proceso vírico, el equipo vitoriano se hizo fuerte para obtener su novena victoria del curso, antes de recibir el próximo sábado en Mendizorroza a un poderoso Girona.

La puesta en escena del Araski resultó esperanzadora. Dos triples, una Hermida y otro de Rodríguez, permitían las primeras ventajas a un equipo muy intenso en su juego y que, plantado en una zona 2-3, desconectó del choque al Lointek.

Un 2-8 de inicio mostraba las buenas vibraciones en un partido con mucho dinamismo. Sin embargo, la ventaja se esfumó en un respiro con Chery haciendo mucho daño bajo aros para propiciar la voltereta. Hill rompió un parcial de 10-0 de las vizcaínas con otro triple que suponía el inicio de cuatro puntos seguidos de la propia canadiense.

En los siguientes minutos, las visitantes siguieron muy firmes atrás y en ataque, alternando puntos por dentro y por fuera. Dos tiros libres de una inspirada Brewer mediado el segundo cuarto colocaban un esclarecedor 16-26 de lo que sucedía en Maloste para alegría para la marea verde.

Allí encontró alivio el Gernika con dos lanzamientos exteriores que rompían su sequía de dos minutos. En ese momento un tiempo muerto de Made frenó la reacción. El Araski mantenía el control del rebote y sobre todo la delantera en el electrónico gracias al acierto en el poste bajo de Rodríguez y Slonjsak, por lo que alcanzó el descanso con un 29-34.

Tras el paso por los vestuarios, las alavesas seguían estando más intensas en los duelos y funcionaban a pleno rendimiento en ambos tableros con Bewer y sobre todo Hermida, mostrando toda su calidad. Dos tiros libres anotados por la propia madrileña confirmaban un espectacular despegue hasta el 31-43 trascurridos cinco minutos desde la reanudación.

El Gernika no paraba de acumular pérdidas de balón ante el ímpetu de las visitantes, que no bajaban un ápice su intensidad. Ni siquiera una defensa zonal de las vizcaínas podía frenarlas, ahora con Lisowa apuntándose a la fiesta con una sucesión de buenas canastas consecutivas al comenzar el último cuarto.

La ventaja no paraba de aumentar y el 45-61, a falta de siete minutos para el final, parecía definitiva y así lo fue. Las locales no pudieron meterse en el partido para tranquilidad de un Araski que manejó con bastante suficiencia los últimos instantes y obtuvo un triunfo vital de cara a la permanencia. Las verdes dominaron todos los parciales y fueron superiores, por lo que el objetivo final está un poco más cerca.