El diputado general de Álava, Ramiro González, ha defendido este lunes ante la comisión de Hacienda de las Juntas Generales que el pacto alcanzado la pasada semana entre el Gobierno Vasco y las tres diputaciones sobre la nueva Ley de Aportaciones "avala la solidez del sistema institucional vasco y la capacidad de llegar a acuerdos y de entendimiento de las instituciones de la CAV".

Sobre todo, en un "contexto de recuperación económica", tal y como están demostrando los datos de recaudación de los últimos meses, ha recordado González.

A juicio del máximo responsable foral, "elevar a la categoría de Ley el acuerdo alcanzado en el Consejo Vasco de Finanzas de febrero de 2019 es un importante hito, por cuanto representa la garantía del principio de suficiencia financiera de todos los territorios históricos".

"Tal como está diseñado, es un buen acuerdo para Álava", ha zanjado González ante los grupos.

Algunos cambios

El diputado general ha detallado que el cambio de porcentaje del coeficiente vertical, que aumenta del 70,04% al 70,81%, es una simple operación de trasvase, con un efecto financiero neutro para las diputaciones.

"Este cambio se debe a la integración dentro del coeficiente vertical de los importes en que se valoran diversas competencias transferidas al Gobierno Vasco que hasta ahora se venían abonando por las diputaciones a través de aportaciones específicas, y que ahora pasan a abonarse a través de la aportación general", ha explicado.

Con respecto a la modificación de la redacción del articulado referido al Fondo general de ajuste, González ha matizado que se mantiene el objetivo de asegurar que la recaudación de cada diputación alcance el 99% de su coeficiente horizontal, y se refuerza el carácter de mecanismo estabilizador del Fondo.

Para ello, el cambio de redacción del articulado referido al Fondo General de Ajuste, que supone un aumento del Fondo hasta el 1,45% de los recursos a distribuir frente al 1% de la metodología actual, es de gran importancia, según ha explicado el diputado general.

"Porque si hasta ahora el segundo tramo del Fondo dependía de la renovación de un acuerdo del CVFP, con la nueva redacción ya esta incluido y fijado en una ley, lo que supone una mayor garantía para las diputaciones".

Los grupos, críticos

Entre las intervenciones de los grupos destacaron las criticas y las preguntas sobre lo que iba a perder Álava con este pacto, algo que no ocurrió en abril, cuando Ramiro González también compareció para hablar sobre el mismo tema en Juntas Generales y la impresión fue que todos los grupos apoyaban el acuerdo.

Esta mañana EH Bildu, sin embargo, lo ha calificado de "un acuerdo decepcionante en el que nada cambia y se beneficia a los de siempre", según el juntero Iñaki Ullibarri.

González le ha contestado que "de EH Bildu no esperamos nada, salvo ver cómo aprovechan la situación de crisis para sacar beneficio político".

Para el diputado general, este "ha sido un acuerdo complicado en el tiempo, pero en la Diputación Foral de Álava vemos que lo que mejor defiende al territorio histórico es tener una garantía", como la que ha generado el pacto del Consejo Vasco de Finanzas, aunque el futuro dependa "de muchos factores, como la crisis económica o la evolución del país".