Representantes de la plantilla de los rocódromos municipales comparecieron ayer en la Comisión de Euskera, Cultura, Educación, Deportes y Salud del Ayuntamiento vitoriano para reclamar que el Consistorio no recorte los horarios de estas instalaciones, en cerca de 280 horas, durante el mes de julio. Según Julio Sánchez, del sindicato ESK, la decisión de recortar los horarios se tomó de forma sorpresiva y supondrá un importante recorte salarial para muchos trabajadores, además de problemas económicos para la propia concesionaria del servicio.

Sánchez afeó además al departamento los cambios de calendario o el hecho de que a estas alturas del año aún se desconozca qué días y en qué horarios abrirán los rocódromos en septiembre, con el perjuicio que ello supone para la conciliación de los miembros de la plantilla de la empresa subcontratada por el Ayuntamiento.

La delegada responsable de este área, Livia López, aseguró por su parte que el recorte horario responde a una previsión de caída de la demanda durante julio a un tercio de la habitual durante el curso ordinario. Explicó, en ese sentido, que "julio es un mes especial, que queda fuera del curso y de los hábitos normales de la ciudadanía". Añadió además que el Ayuntamiento abonará a la empresa las horas no prestadas, en contra de la información que se le había trasladado al responsable de ESK. "No hay ningún tipo de indicación de recortes económicos en este ámbito", aseguró la concejala de Deporte y Salud.

En cuanto a los calendarios, afirmó que se diseñó uno que abarcaba desde enero hasta junio, y que si hubo cambios -por ejemplo cierres en el rocódromo de Ariznabarra por la celebración de otros eventos deportivos- se debió al cumplimiento de los protocolos de respuesta ante la pandemia. En la actualidad se trabaja en definir el calendario que abarcará desde septiembre hasta diciembre. Livia López explicó además que el recorte horario fue comunicado a la empresa el 1 de junio, después de que el portavoz de ESK afirmara que la plantilla no tuvo conocimiento del mismo hasta mediados de mes.

Este recorte horario se produce en un momento en el que la licitación iniciada a principios de año para la prestación del servicio ha quedado desierta porque solo se ha presentado al concurso una empresa que no ha alcanzado la valoración técnica necesaria. Dada la situación, el Ayuntamiento prepara la licitación para un contrato puente de tres meses de duración, de octubre a diciembre, y con condiciones similares a las de la concesión actual, mientras trabaja en el concurso para una prestación más a largo plazo en estas instalaciones municipales.

Declaración judicial. La concejala de Salud y Deporte del Ayuntamiento vitoriano, Livia López, aseguró ayer que no tuvo conocimiento de la denuncia por agresión sexual que interpusieron siete voluntarias de la perrera municipal contra un trabajador del centro hasta el 20 de mayo de 2020, momento en que se apartó a esta persona de su puesto. López respondía así a la pregunta de la edil de EH Bildu Iratxe López de Aberasturi, quien afirmó que la jefa de unidad declaró en el juzgado haber sido informada de los hechos el 18 de septiembre de 2019, y que comunicó los mismos al director de Salud Pública pocos días después. "Yo puedo decir cuándo lo supe yo, y lo mantengo porque es verdad", aseveró.