Vitoria. La población de origen inmigrante supone el 12,1 % del total en Álava y se confirma como un fenómeno estructural con presencia continuada en el territorio, "muy sensible" a la situación económica y con procedencia mayoritaria de países latinoamericanos y de África.

Estos datos se desprenden de un estudio elaborado por Ikuspegi y presentado este jueves por la Diputación alavesa en una comparecencia de prensa.

Según los datos aportados en una nota de prensa, el 12,1 % de la población alavesa procede de otros países y se divide a partes iguales entre hombres (49,2 %) y mujeres (50,8 %). Vitoria cuenta con el porcentaje más alto de habitantes de origen extranjero (13,2 %), seguido de Rioja Alavesa (11,5 %), mientras que el menor lo tienen las cuadrillas de Montaña Alavesa y de Gorbeialdea, ambas con un 7 %.

El "Estudio diagnóstico del fenómeno migratorio en Álava", punto de partida para el futuro plan foral de actuación en materia de interculturalidad e inmigración, recoge que la sociedad alavesa asume que la población inmigrante ha venido para quedarse porque es necesaria para el avance del territorio, y que los ciudadanos llegados de otros países muestran su satisfacción con su vida en Álava.

Así lo han explicado la investigadora de Ikuspegi Maite Fouassier y la directora foral de Igualdad y Derechos Humanos, Nerea Melgosa, que han indicado que la población de origen extranjero es joven, principalmente procedente de países latinoamericanos y del Magreb.

PROBLEMAS PARA ACCEDER A UNA VIVIENDA El estudio señala que este colectivo es uno de los que presenta mayores problemas para acceder a una vivienda, con una mayor concentración en el sector del alquiler, y recoge que la demanda por parte de estas personas de los servicios sociales ha aumentado desde 2012, provocada por la crisis económica y sus consecuencias, lo que les ha llevado a percibir la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) en mayor medida "de lo que les correspondería por azar".

Respecto al mercado laboral, la recuperación económica de los últimos años trajo consigo un descenso del desempleo en este colectivo, pero ha aumentado el índice de rotación, en empleos poco cualificados y precarios.

Por su parte, en el sistema educativo no universitario se perciben diferencias territoriales, con un mayor peso de este colectivo en Montaña Alavesa, Rioja Alavesa, Llanada Alavesa y Vitoria. El modelo D es en el que se matricula un mayor número de alumnado de origen extranjero, que cursa los estudios de forma mayoritaria en la red pública.

Otro de los apartados hace referencia a las percepciones de este colectivo. Para recogerlas se llevaron a cabo 17 grupos de discusión con personas de diversos orígenes residentes en el territorio alavés.

La recopilación de la información ha permitido conocer que los procesos de integración son más positivos en los entornos más rurales, y la importancia que le dan a que el futuro de sus hijos sea mejor que la vida que sus progenitores están llevando, deseo que va de la mano de sus mayoritarias expectativas de quedarse en Álava.