Escasez de fondo de armario en el Alavés

Durante el partido entre el Alavés y el Celta del lunes pudo comprobarse algo que, solo observando los últimos movimientos del club gasteiztarra en el mercado, ya podía preverse.

Cuando Eduardo Coudet, con el 1-1 en el marcador, miró al banquillo en busca de piezas que le permitieran revolucionar el choque, lo que se encontró fue un desierto. Y no solo por el número de alternativas, también debido a la disposición de las mismas.

El Chacho, ya de primeras, solo usó tres de sus cinco cambios disponibles, dando entrada a Carlos Martín (Conechny), Villalibre (Protesoni) y Toni Martínez (Kike García). Este último, además, ya en el tiempo de prolongación.

En ese momento, el entrenador argentino se quedó en la caseta con cuatro centrales, un mediocentro –del filial– y un solo futbolista de banda, el cual apenas ha jugado en lo que va de campaña (Hugo Novoa).

En esa línea, las expectativas con las sustituciones que sí se hicieron tampoco podían ser muy altas. De los tres sustitutos, el único que ha cumplido en los últimos meses, y sin grandes alardes, es Carlos Martín. Villalibre apenas ha tenido minutos, ni con Luis García ni con Coudet, y Toni lleva tiempo sin aportar. No sorprende, por eso, que ninguno de ellos fuera capaz de tener incidencia en la contienda. Casi ni tocaron bola.

Bastante optimista había que ser, de todas formas, para esperar otra cosa del fondo de armario después de lo acontecido días antes. El Alavés ha dejado salir a Abde Rebbach, Luka Romero y Stoichkov, tres hombres de ataque, y no ha incorporado todavía a ningún reemplazo.

Su única entrada en enero es Facundo Garcés. Alguien que ya estaba fichado en verano y que no apunta a debutar pronto. No al menos de titular.

SEIS DÍAS POR DELANTE

Se da por hecho, pues lo contrario no tendría sentido, que Sergio Fernández tiene ya cerrado el reemplazo de alguno de los mencionados. El problema es que, en vista de cómo está la pelea por la permanencia, cada punto cuenta, y se están perdiendo más de los que se deberían. La falta de revulsivos no ha sido siempre el factor decisivo para ello, pero cualquier detalle marca diferencias cuando todo está así de igualado en el terreno de juego.

Seis, cabe recordar, son los días que restan al Alavés para cerrar alguno de los refuerzos que tiene en mente, pues el lunes, a las 23.59 horas, LaLiga echará el cierre a la ventana que abrió el 2 de enero. El mercado invernal es siempre una plaza complicada, pero pocas excusas tiene el club gasteiztarra para no fichar después de las salidas que ha habido. Otro de los asuntos pendientes es la renovación de Abdel Abqar, de la que no hay noticias desde hace tiempo.