vitoria - Nuevo incidente originado por un jugador del filial del Deportivo Alavés, aunque mismo protagonista. Antonio Montoro fue identificado el pasado domingo de madrugada por la Ertzaintza en una céntrica discoteca de Vitoria tras protagonizar una pelea con otra persona. Los hechos tuvieron lugar al filo de las 6.00 horas y, tras la llamada por parte de los responsables del centro hostelero a la policía autonómica, una pareja de dicho cuerpo se presentó en el lugar para recabar la información pertinente de los implicados. El central madrileño estaba acompañado por su hermano en el momento del incidente y tras varios minutos de conversación para atestiguar lo acontecido se fue a su domicilio. Eso sí, uno de los pómulos de su cara reflejaba el cariz que había tenido dicho enfrentamiento.
Todo ello sucedió horas después de que Montoro participara el sábado en Sestao con el equipo de Igor Oca en la victoria ante el San Pedro. El domingo acudió a Ibaia al entrenamiento de recuperación que estaba fijado y al ser preguntado por el estado de su rostro, con un golpe muy visible, adujo que alguien había intentado robarle la cartera y por eso empezó la trifulca. Lo cierto es que el defensa llegado esta temporada al Deportivo Alavés procedente del Atlético de Madrid ha estado implicado ya en otra salida nocturna, por la que recibió una dura sanción económica y también deportiva estando sin jugar algunos encuentros. Fue el pasado 15 de noviembre en Bilbao, con otros tres compañeros del conjunto nodriza del club albiazul. La entidad que preside Alfonso Fernández de Troconiz aplicó el código interno entonces y habrá que ver si este episodio no tiene una consecuencia mayor para Montoro en forma de rescisión de su contrato. Entonces no estuvo convocado ante el Santutxu y el Pasaia, mientras que en Ordizia jugó tan sólo treinta minutos.
Con apenas diez días para el cierre del mercado habrá que ver qué sucede con su futuro, aunque lo cierto es que conductas como esta dejan al futbolista en una situación francamente comprometida. Hechos como este además ponen en entredicho el apego del resto del vestuario hacia él y más tratándose de uno de los integrantes del filial que más cobra. En cierta forma todo ello contradice su buen rendimiento sobre el campo y es que Montoro es uno de los fijos para el técnico vizcaíno desde el inicio de temporada y salvo los partidos anteriormente mencionados, apenas ha tenido que quedarse en la grada hasta ahora. - M. Uriarte