Como suele ser habitual, la evolución de la pandemia en las calles de Álava está teniendo en los últimos días un fiel reflejo en su red residencial: la incidencia del virus comienza a caer en los centros de personas mayores y discapacidad, pero el reciente pico de contagios vuelve a traducirse en una cara factura en forma de muertes.
Según han detallado este martes fuentes forales, dos personas residentes de los centros privados Albertia Iradier y Lovi que tenían covid-19 y estaban hospitalizadas han fallecido esta última semana. Se trata de los primeros decesos registrados en las residencias desde el pasado 14 de junio.
En este momento, del total de casi 3.000 personas usuarias de las residencias para personas mayores 36 tienen el coronavirus activo, cuatro menos que hace una semana, de las cuales solo una se encuentra hospitalizada. Salvo en este caso, el resto de residentes se encuentran asintomáticos o con síntomas leves.
Casos en diez residencias
Las personas con el virus activo están repartidas en diez residencias, el mismo número que la semana pasada. Con once casos activos, la residencia pública Txagorritxu es la que tiene una mayor incidencia, seguida por las privadas Domusvi Gazalbide y Alday, ambas con siete.
Además, 38 personas que trabajan en las residencias para personas mayores se encuentran de baja por ser contactos estrechos de personas enfermas o por ser positivas en coronavirus. Son 12 personas menos que la semana pasada.
Por otra parte, 24 personas mayores se han recuperado de la enfermedad a lo largo de esta última semana. Buenas noticias también extensivas a la residencia foral para personas con discapacidad intelectual Etxebidea, donde todos los usuarias se han recuperado de la enfermedad.
