vitoria - El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Álava aprobó ayer el documento de gestión de la Zona Especial de Conservación (ZEC) Sierras Meridionales de Álava, que contempla un total de 96 medidas de protección y conservación de este espacio natural, integrado en la Red Natura 2000, y formado por Sierra Cantabria, Toloño, Codés y Lokiz. En total, este centenar de medidas busca mejorar el estado de la flora y fauna de la zona, así como el de sus hábitats, en los próximos seis años. La estimación presupuestaria que supondrá llevar a cabo estas medidas supera el millón y medio de euros, que deberán aportar todas las administraciones competentes, condicionadas a su disponibilidad presupuestaria y a la cofinanciación europea, recogida en el artículo 8 de la Directiva 92/43/CE.

Con la aprobación de esta ZEC, el territorio histórico de Álava tiene ya completadas la declaración de 18 de los 29 espacios de la Red Natura 2000. Entre las medidas recogidas en el documento de gestión, destacan las referidas a la ordenación de montes, a la elaboración de nuevos planes de gestión de reservas forestales y al planeamiento de proyectos de ordenación de pastos. Asimismo, son muchas las medidas que buscan proteger especies de interés como el visón europeo, el águila de Bonelli, el alimoche, la chova piquirroja o la rana dalmatina, entre otras. Además, se contempla la mejora de la conectividad ecológica mediante drenajes, setos, parcelas no laboradas u otras estructuras, que puedan favorecer la conexión en la red fluvial y humedales.

Estas zonas de montaña no son las únicas que disponen de medidas de protección aprobadas por la Diputación Foral de Álava. De hecho, durante el pasado mes de julio, el ejecutivo provincial hizo lo propio con las ZEC de Montes Altos de Vitoria y de Robledales Isla de la Llanada. El documento referido a la primera recogía 56 medidas para su conservación y protección presupuestadas en 753.775 euros. En cuanto al de la segunda, desgrana 51 medidas con un presupuesto de 645.400 euros. Todas ellas están contempladas para su ejecución en los próximos seis años por todas las instituciones con competencia.

Las ZEC son figuras de protección que surgen tras la creación de la Red europea Natura 2000 y que buscan proteger y conservar la biodiversidad y los hábitats de flora y fauna frente a todas sus amenazas. Así, la ZEC Montes Altos de Vitoria mantiene una de las extensiones forestales autóctonas mejor conservadas de Euskadi. Destaca la excelente representación de hayedos atlánticos, con acebos y tejos, así como robledales y quejigales. Además, supone un punto estratégico de conectividad ecológica con las sierras de Tuyo, Turiso y Badaia, por un lado, y con Entzia y con Izki, por otro, a través de los hayedos de la sierra de Iturrieta.

Por su parte, el Plan de Gestión de la ZEC Robledales Isla de la Llanada pretende crear nexos de unión entre las trece islas de robledal existentes actualmente y que, en la primera mitad del siglo XX, formaban una masa boscosa uniforme, hoy en día fragmentada por la acción humana. Precisamente la conservación de estas manchas residuales, ejemplo testimonial de lo que en su día fue el ecosistema dominante de la Llanada, constituye el principal motivo por el que este conjunto de pequeños espacios fue seleccionado para formar parte de la Red Natura 2000. Y es que, el elevado grado de fragmentación de estas zonas impide el asentamiento de poblaciones faunísticas viables. Es por ello que se hace necesario trabajar con objetivos a largo plazo.

lago de arreo Aparte, en junio se conoció que la Red Natura 2000 había culminado su proceso de creación e implantación en el País Vasco con la designación de la ZEC del lago de Arreo y las de Aralar y Aizkorri-Aratz -ésta también discurre en parte por el territorio histórico-, los tres últimos de los 55 espacios que la componen. Así lo explicó la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno Vasco, Ana Oregi, tras el simbólico Consejo de Gobierno celebrado en el centro de Biodiversidad de Euskadi en Urdaibai coincidiendo con la European Green Week y el Día Internacional de la Naturaleza. “El Gobierno Vasco y las diputaciones forales realizamos un trabajo común de definición y gestión de estos espacios”, añadió la gestora. En total, la citada red está formada en la CAV por 47 Zonas Especiales de Conservación (ZEC), cuatro Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y otros cuatro espacios que son a la vez ZEC y ZEPA, 55 en total.

Este entramado se configura como el principal instrumento para frenar la pérdida de biodiversidad y como la herramienta básica elegida por Europa para la conservación de la naturaleza. La red ambiental está constituida en la Unión Europea por 27.384 espacios y abarca el 18% del territorio, una superficie de 1,1 millones de kilómetros cuadrados. Esos datos, en el caso de Euskadi, se traducen en 55 espacios, que se extienden por una superficie aproximada de 1.500 kilómetros cuadrados, lo que supone en torno al 20,5% del territorio. En estos espacios se encuentran ecosistemas que incluyen mar, bosques, marismas, zonas húmedas, prados de siega, pastos de montaña, brezales y otros matorrales, ríos, turberas o acantilados.

Es más, los espacios recogidos en la Red Natura 2000 “son la mayor aportación de la sociedad vasca a la protección y mejora de la naturaleza en Europa”, añadió la consejera. La selección de los espacios fue propuesta tras los acuerdos de Consejo de Gobierno en diciembre de 1997, diciembre de 2000 y junio de 2003. El valor de estos lugares fue reconocido por la Comisión Europea al incluir la totalidad de los espacios propuestos por Euskadi.

Sierras Meridionales. Con la aprobación de la ZEC de las denominadas Sierras Meridionales, el territorio histórico tiene ya completadas la declaración de 18 de los 29 espacios de la Red Natura 2000. Entre las medidas recogidas en el documento de gestión, destacan las referidas a la ordenación de montes, a la elaboración de nuevos planes de gestión de reservas forestales y al planeamiento de proyectos de ordenación de pastos. Asimismo, son muchas las medidas que buscan proteger distintas especies.