- España presentó ayer formalmente a la Comisión Europea (CE) su plan de recuperación, transformación y resiliencia con el detalle de las reformas e inversiones, por importe de 70.000 millones de euros, que prevé ejecutar entre 2021 y 2023 con cargo a las ayudas del fondo de recuperación europeo. “Hemos recibido el plan de recuperación de España”, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la red social Twitter.

Los fondos europeos contribuirán “a financiar la recuperación del país a través de proyectos vinculados a la transición ecológica y digital, la cohesión y la igualdad de género”, afirmó Von der Leyen.

El plan español, de 348 páginas, se estructura en torno a cuatro pilares: transformación verde; transformación digital; cohesión social y territorial; e igualdad de género, precisó el Ejecutivo comunitario en un comunicado. Además, añadió la Comisión, incluye medidas en materia de movilidad sostenible, eficiencia energética en los edificios, energía limpia, competencias digitales, conectividad digital, apoyo al sector industrial y a las pymes, y vivienda social.

Los proyectos del plan español se centran principalmente en el periodo 2021-2023 y éstos abarcan “siete ámbitos emblemáticos europeos”, continúa la nota.

También depositaron ayer sus planes de recuperación Dinamarca, Luxemburgo y Letonia, según informó la Comisión Europea en un comunicado. Eslovaquia y Francia depositaron sus planes de recuperación el pasado jueves, mientras que Alemania y Grecia lo hicieron el miércoles, y Portugal, que este semestre ostenta la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), inauguró el registro el 22 de abril.

El Ejecutivo comunitario tiene ahora dos meses de plazo para evaluar el plan y, si da su visto bueno, los Estados miembros tendrán otras cuatro semanas para aprobarlo por mayoría cualificada. Solo con la luz verde de ambos podrán llegar las ayudas.

Bruselas espera que en los próximos días le lleguen un “número importante” de planes de otros países, según un portavoz comunitario. Ayer terminaba el plazo indicativo para que los Veintisiete entregasen sus planes de recuperación, una fecha que, por ahora, han logrado cumplir nueve de los socios comunitarios.

Tras felicitar a los países que ya han depositado sus planes, el primer ministro portugués, Antònio Costa, anunció el jueves en su cuenta de Twitter que la presidencia portuguesa “programará la aprobación de los primeros planes” el próximo 18 de junio, cuando se reunirán los ministros de Economía y Finanzas de los Veintisiete (Ecofin). Asimismo, dijo que está dispuesto a promover una segunda reunión extraordinaria en la última semana de junio para aprobar la segunda ronda de paquetes nacionales.

“No podemos perder más tiempo, debemos lanzar la recuperación”, subrayó Costa en un claro mensaje a la Comisión Europea, que asegura que necesitará los dos meses previstos en la legislación para evaluar unos documentos que en muchos casos tienen miles de páginas.

Comisión Europea. La Comisión Europea necesitará los dos meses previstos en la legislación para evaluar unos documentos que en muchos casos tienen miles de páginas.

Estados. Una vez que la Comisión dé su visto bueno, los Estados tienen otras cuatro semanas para avalar el plan por mayoría cualificada (al menos 15 de 27 deben apoyarlo). Pero además, para que las ayudas empiecen a entregarse a los países, es imprescindible que todos ratifiquen la legislación que permitirá al Ejecutivo comunitario endeudarse en los mercados para financiar el fondo, y faltan ocho por hacerlo. Bruselas prevé desembolsar en julio las primeras ayudas.