BILBAO. Según han señalado, cuestiones como poder decidir sobre el estatus territorial de Euskadi "no tienen cabida en un Estatuto si se quiere que sea acorde al marco legal", pero ello no puede llevar "a renunciar políticamente a abordarlas", motivo por el que proponen un modelo similar al de Canadá mediante un pacto de claridad.

Elkarrekin Podemos ha presentado este sábado en Bilbao su propuesta de autogobierno'Un acuerdo para vivir mejor. Guztion ituna' que ha contado con la presencia de los líderes que integran la coalición y que, en su opinión, además de "responder a las necesidades de la ciudadanía" debe representar un acuerdo "pensado para durar, al menos, una generación".

El documento, de 98 páginas, abarca campos como el blindaje de los derechos sociales, el reconocimiento de la pluralidad o el derecho a decidir en una clave bilateral y busca sacar al autogobierno vasco de "dinámicas partidistas que lo someten al cambalache en Madrid o miden las competencias al peso".

En la presentación, el portavoz de la coalición en el Parlamento, Lánder Martínez, ha afirmado que su propuesta pasa de un texto "corto administrativo que solo reparte competencias", como a su juicio hace el actual Estatuto de Gernika, a un nuevo texto "mucho más político de carácter prácticamente constitucional en su contenido".

"Esto implica pasar de una mera reivindicación de más competencias a un gran acuerdo político de futuro. Por eso no hablamos de un nuevo Estatuto sino de renovar el pacto social vasco", ha sostenido.

Entre los contenidos que debería abarcar el nuevo articulado estaría el blindaje de los derechos sociales en cuestiones como la garantía de ingresos, los derechos a la educación, salud, inclusión social o vivienda.

En materia de fiscalidad proponen una política fiscal "equitativa en todo el territorio de Euskadi y que su armonización sea competencia exclusiva del Parlamento vasco". En lo que se refiere a los derechos lingüísticos, se incide en que el euskera "debe ser valorado y protegido de forma permanente" de tal forma que se garantice su aprendizaje de forma "gratuita".

El texto también recoge que las instituciones vascas deberán asegurar el principio de igualdad entre mujeres y hombres con "acciones positivas para una igualdad efectiva", así como el desarrollo de una "fiscalidad con perspectiva de género", entre otras cuestiones.

En lo que se refiere a convivencia, recogen la necesidad de que las instituciones públicas preserven la memoria y dignidad de las víctimas de vulneraciones graves de derechos humanos" en el ámbito de la Guerra Civil y el Franquismo, así como en lo que califican de "violencia específica de Euskal Herria".

LEY DE TERRITORIOS HISTORICOS

También plantean la necesidad de una nueva Ley de Territorios Históricos, así como de una nueva Ley Municipal y de Aportaciones que regulen las diferentes administraciones territoriales.

"Hablar de autogobierno no es solo hablar de competencias respecto a Madrid sino de cómo se ejercen dentro de nuestro territorio. Si se puede decidir el estatus de Euskadi respecto al resto del Estado no puede vetarse el debate sobre estas tres leyes", ha advertido Martínez, que ha calificado la propuesta de Elkarrekin Podemos de "netamente municipalista".

Respecto a la participación ciudadana en "cuestiones que le afectan directamente", abogan por una Ley de Participación Ciudadana que facilite la organización de iniciativas legislaturas populares o consultas sobre temas como grandes infraestructuras o cuestiones de Medio Ambiente.

En su opinión, el nuevo Estatuto de Autonomía, "de carácter político y constitucional, no meramente administrativo", debe "explorar al máximo las posibilidades del actual marco legal".

Por ello, debe abarcar el "carácter nacional" vasco, así como reconocer "la pluralidad identitaria de su sociedad", la posibilidad de establecer órganos institucionales comunes con Navarra, y la creación de una Eurorregión vasca u "otras estructuras institucionales que la evolución del Tratado de la Unión Europea posibilite".

Para "facilitar las posibilidades de acuerdo" entre formaciones políticas, Martínez ha incidido en que estas cuestiones ya fueron objeto de "consenso" en 2006 por parte de PNV, PSE y la antigua Batasuna en las conocidas como 'negociaciones de Loyola'.

Por otro lado, dentro de un estado plurinacional, consideran que la opción de un estado federal o confederal es "la que mejor encaja", aunque han diferenciado su propuesta de la realizada esta semana por el lehendakari, Iñigo Urkullu, y que han considerado que "no concreta" y es "una ocurrencia".

Tras valorar la "pluralidad" de la sociedad vasca, Elkarrekin Podemos ha subrayado la existencia de una "amplia mayoría ciudadana" que no ve "satisfechas sus opciones de estatus en el actual modelo autonómico". No obstante, ha reconocido que no existe "una pulsión mayoritaria de corte "unilateralista para modificarlo".

"Hablar de federalismo y confederalismo es mucho más que una cuestión territorial, no puede ser una línea de discurso de un día en el Parlamento sino de un proyecto de fondo a largo plazo", ha señalado Martínez.

Tras reconocer que cuestiones como "poder decidir sobre el estatus territorial" no tienen cabida en un Estatuto si se quiere que éste sea "acorde al margen legal", ha incidido en que ello "no puede llevar a que renunciemos a abordarlas".

MODELO CANADIENSE

Como solución, y con el modelo canadiense como referencia, Elkarrekin Podemos fundamenta el ejercicio sobre el derecho a decidir sobre el estatus territorial en la voluntad de la ciudadanía y "no en la idea de derechos históricos o del hecho nacional".

De este modo, proponen un pacto de claridad entre partidos vascos que "pasa por dejar de identificar derecho a decidir con el derecho a la secesión", pero que sentaría las bases para "abordar una consulta pactada legal y bilateral con preguntas claras y mayorías cualificadas". "No vale la mitad más uno", ha añadido.

La elaboración de este pacto sería así un proceso paralelo al de la elaboración de un nuevo Estatuto y una vez acordado se elevaría al Congreso de los Diputados para que, como en Canadá, se promulgue una ley de Claridad que articule "cauces legales, bilaterales y pactados para el ejercicio de ese derecho".

Se trataría de una ley que valdría para Euskadi, pero también para otros territorios del Estado y que "podría tomar parte de una reforma constitucional o no".

A su juicio, hablar de un nuevo estatus "no implica necesariamente preguntar por un sí o no a la independencia", sino que hay que abrir el "abanico de opciones y poner en igualdad de condiciones las diferentes opciones: autonomía, federalismo, confederalismo o estado independiente". En este sentido, la preferencia de Elkarrekin Podemos pasaría por una "cosoberanía que se mueva entre el federalismo y el confederalismo".