MADRID. Así, en 1993 referían tener esta patología 1,8 de cada 1.000 habitantes y en 2006 la cifra era de 6,1, lo que supone un crecimiento de más del 200%.

Así se desprende de un estudio, que acaba de publicarse en la Revista Española de Cardiología (REC), realizado a partir de los datos de las seis Encuestas Nacionales de Salud.

El análisis concluye además que el crecimiento de la prevalencia de obesidad mórbida es más rápido que el de una obesidad más leve -más del 200% frente a un 65%-.

Se considera que una persona sufre de obesidad mórbida cuando su Índice de Masa Corporal es igual o superior a 40. El IMC es un indicativo del peso de una persona en relación con su altura y se calcula mediante una división entre el peso en kilos y la altura en metros cuadrados.

El estudio ha desvelado que, aunque siguen siendo las mujeres las que más padecen de obesidad mórbida -6,8 de cada mil mujeres y 5,4 de cada mil hombres- el crecimiento relativo entre los varones ha sido un tres veces superior.

Para el Profesor Miguel Ángel Martínez, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra, los resultados de este estudio obligan a tomar "urgentemente" medidas preventivas eficaces, "ya que nos estamos acercando con demasiada rapidez a las cifras de obesidad que Estados Unidos tenía hace veinte años".

En la actualidad, EEUU tiene una prevalencia de obesidad mórbida de entre el 5% y el 6% de la población. "Nosotros por el momento no llegamos al 1%, pero estamos tendiendo a alcanzar estas cifras en pocos años", ha comentado el experto.

Martínez ha apuntado que una alimentación "poco saludable, el aumento de azúcares añadidos, una vida sedentaria y una predisposición genética son los factores que ayudan a la rápida proliferación de esta enfermedad".

Los autores del estudio han querido destacar que la obesidad es uno de los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares y que padecer de obesidad mórbida triplica las posibilidades de sufrir algún episodio cardíaco.