La ciberseguridad ha cobrado especial relevancia a lo largo de 2023. Ya no se trata de un asunto que únicamente compete a la empresa como hasta ahora. Cierto es que la digitalización del negocio ha acarreado paralelamente una necesidad de protección frente a los ataques informáticos provocados por los hackers que chantajean con un rescate económico para evitar más perjuicios. Sin embargo, cobran cada vez más fuerza ciberataques de otro tipo que obliga a una mayor movilización de recursos públicos para hacerles frente. Así uno de cada cuatro delitos en la Comunidad Autónoma Vasca ya se cometen a través de internet, con especial incidencia en lo que se refiere a ciberestafas, al igual que en Nafarroa, donde los ciberdelitos han aumentado en el presente ejercicio un 26%. A consecuencia de ello, desde la CAV el departamento de Seguridad del Gobierno vasco ha puesto en marcha durante este ejercicio Ciberzaintza, la nueva Agencia Vasca de Ciberseguridad, para la investigación y análisis de los ciberincidentes y ciberataques con el objetivo de responder ante ellos promoviendo medidas de protección adecuadas frente a las ciberamenazas. A la vez, desde la Comunidad Foral se avanza en la creación de su propio centro de ciberseguridad, Navarra Cybersecurity Center, cuya misión será fortalecer la ciberseguridad en sectores clave como las empresas y la ciudadanía. Un aumento de la ciberseguridad que merece mención especial en lo que se refiere a la protección de los menores, habida cuenta, especialmente, del fuerte incremento de delitos que se ha registrado durante este ejercicio. Así, en Euskadi se produce una denuncia por ciberacoso a menores cada tres días. Del mismo modo, la Policía Nacional detuvo en marzo en Iruña al presunto autor de dos agresiones sexuales a menores y 15 delitos del bautizado como child grooming, ciberacoso sexual de menores a través de internet, teléfono u otra tecnología con una persona menor de 16 años donde se propone a la víctima un encuentro sexual. Protección a la infancia y a la adolescencia que, como recuerdan los expertos, no solo debe llegar desde el ámbito policial y/o judicial, sino también de un mayor control por parte de padres y madres ante el acceso a determinados contenidos en los que se pueden esconder depredadores. Una alerta en general para recordar que el ordenador, móvil o tablet se convierte en la entrada a los hogares, por la puerta de atrás.