Logroño está de moda. Es un centro neurálgico en la distribución de los flujos turísticos y la actividad empresarial en la comunidad de La Rioja; posee las indispensables estructuras e infraestructuras de apoyo, así como recursos y productos relacionados con el turismo enológico y gastronómico, el religioso (Ruta Jacobea), el turismo cultural, el turismo deportivo (golf), el turismo de compras y el turismo de reuniones. Dicen los riojanos que "contamos con un carácter abierto, alegre y emprendedor". La hospitalidad y la cordialidad en el trato son principales señas de identidad para el vecino logroñés, que cuenta a su favor con una variada oferta de cultura, ocio y otras diversiones que han dado a conocer la ciudad al exterior.
Logroño abre sus puertas e invita a acercarse a sus costumbres, a degustar sus platos típicos, sus pinchos y tapas, acompañadas de una copa de buen vino. La capital riojana presume de la riqueza de estilos en sus edificios -de los tradicionales, con sus bodegas subterráneas, y de los modernos y vanguardistas- y también de los servicios que ofrece a quien la visita, ya sea para alojarse o la buscar un rato de ocio o de práctica deportiva.
Esta ciudad lo tiene todo a la distancia de un paseo. Las rutas turísticas son otro de los reclamos para el visitante. La oferta es variada y desde el casco antiguo hasta los entornos naturales como el parque de La Grajera, se puede disfrutar de los más variados atractivos arquitectónicos, culturales o gastronómicos; todo ello bañado en un buen Rioja, base de la cultura riojana. El Camino de Santiago, los edificios más representativos e incluso el seguimiento del impresionante crecimiento de Logroño son buenos apuntes para disfrutar de una ciudad que hoy abraza al río Ebro en su constatable desarrollo. Como ejemplo de su inquietud cultural está la cobertura por parte del Ayuntamiento de Logroño del Teatro Bretón, que ofrece los últimos espectáculos del momento.
Monasterios de Yuso y Suso
Los Monasterios de Yuso y Suso son Patrimonio de la Humanidad y están situados en el pueblo de San Millán de la Cogolla, en el valle del río Cárdenas, afluente del río Najerilla, en las estribaciones de la Sierra de la Demanda, bajo las cumbres nevadas en invierno del monte San Lorenzo, el más alto de La Rioja ( 2.262 metros). El Monasterio de Suso surgió de las cuevas que habitaron los eremitas discípulos de San Millán en el siglo VI y es muestra de diferentes estilos arquitectónicos entre los siglos VI y X: visigótico, mozárabe y románico.
El Monasterio de Yuso, construido para ampliar el de Suso en el siglo XI, destaca por sus grandes dimensiones. Fue reconstruido en los siglos XVI, XVII y XVIII, y en él se conjugan diferentes estilos: renacentista y barroco principalmente.
Parque Natural de Sierra Cebollera
En la vertiente Norte de la Sierra de Cebollera, en el alto valle del río Iregua, en la comarca del Camero Nuevo, a unos 50 kilómetros de Logroño por la carretera N-111.
Tiene una extensión de 23.640 hectáreas la Sierra de Cebollera, un enclave geológico privilegiado dentro del Sistema Ibérico, por las formaciones glaciares, los hoyos, en altitudes superiores a los 2.000 metros.
Santo Domingo de la Calzada
Vinculada al Santo Domingo y a sus obras de construcción sobre la calzada romana, la ciudad nació y creció a partir del Hospital de Peregrinos que fundó el Santo alrededor de la segunda mitad del siglo XII, además de un puente sobre el río Oja para facilitar el paso de los peregrinos. Esta hospedería propició su crecimiento y, a continuación, la ruta Jacobea y se convirtió en un núcleo artístico, religioso y económico importante. Pujanza en la Baja Edad Media.
La Catedral de Santo Domingo consagrada en el año 1106, se convirtió en catedral en el año 1232. En los alrededores, la ermita de las Abejas y del Santo. Próximo a Valdezcaray y a la sierra de la Demanda.