Mariló Montero, colaboradora de 'Espejo Público’ de Antena 3, ha vuelto a situarse en el centro de la polémica. El pasado viernes, durante el programa presentado por Susanna Griso, afirmó que  un "tío muy famoso" le había tocado el culo. Lejos de quedarse en una simple anécdota, la opinión de la navarra ha generado una gran controversia.

La colaboradora de ‘Espejo Público’ explicaba lo sucedido a raíz del debate de casos de acoso sexual sufridos por mujeres. “Todavía hay mucho mamarracho que te mete mano”, empezó Mariló Montero, admitiendo que reaccionó con calma para no crear un “cisma público”

“¿Qué hago? ¿Le doy una hostia en ese momento? Yo tengo la premisa de que no estoy con tíos casados, pero me entran muchos. A mí lo que me sale es darle una bofetada ahí mismo”, seguía contando la también presentadora.

“Pero también tengo que pensar en el cisma que se monta públicamente, porque estoy en un evento público. A mí eso me lo hace en privado y le doy una hostia que lo dejo sin dientes”, terminó de contar la navarra.

Después de su relato, los medios de comunicación tacharon lo sucedido como “agresión sexual”. Ayer, Mariló Montero lo negó, provocando un tenso enfrentamiento con Gonzalo Miró, otro de los colaboradores del programa

“No he puesto denuncia porque no ha habido agresión sexual y, como no ha habido agresión sexual, no he denunciado. Una agresión sexual es un comportamiento sexual no deseado con actos que usan la intimidación”, expresó ella, aclarando que sólo le había “tocado el culo”.

Entonces, fue Gonzalo Miró el que explotó. Indignado, el periodista apuntó que eso no quiere decir que no sufriera una agresión sexual: “Hoy en día sí que lo es, otra cosa es que tú no quieras denunciarlo”.

Con la ley en la mano

En aquel momento, la abogada Montse Suárez matizó lo siguiente: “La ley del sí es sí modifica determinados artículos del Código Penal. Por tanto, el tocamiento en el trasero de Mariló Montero es de forma meridiana e indubitada un acto de agresión sexual”.

“Ahora bien, entiendo a Mariló. Entiendo que ella no lo interprete así y que su ofensa no sea la de una agresión sexual”, dijo la jurista. Pero la colaboradora no compartía ese punto de vista: “¿Vas a meter a un tío en la cárcel porque te ponga la mano en el culo? Es para analizarlo”.

A medida que el debate continuaba, Gonzalo Miró zanjó la charla con una sentencia muy clara: “Que sepa el público que si a un hombre o a una mujer les tocan el culo sin su consentimiento, pueden denunciarlo porque es delito”.