Tiene 27 años y estudió el doble grado ADE y Derecho porque era lo que más le llamaba la atención. Hoy es una pieza clave dentro de Muebles Merke, una empresa familiar que cuenta con la experiencia que supone el trabajo de un cuarto de siglo. “Trabajar en la empresa familiar tiene sus pros y sus contras. Trabajas más horas que si fueras a otra e hicieses tus ocho horas, pero también puedes coger momentos libres ajustados a tus necesidades”, explica Lorena Gacho que destaca la exigencia que supone que confíen en ella para continuar un trabajo de 25 años. “Cuando se baja la persiana la responsabilidad se va contigo a casa y la confianza depositada en ti hace que haya una exigencia extra”, cuenta.
"Trabajar en la empresa familiar tiene sus pros y sus contras, pero sobre todo conlleva una gran responsabilidad porque la confianza depositada en ti es una gran exigencia"
Lorena encarna el relevo generacional. “Comenzaron mis padres, yo soy la segunda generación y pronto vendrá mi hermana a trabajar conmigo”, señala mientras explica que sus padres “llevan el cambio con ilusión porque si tú lo has puesto todo para empezar un negocio, supongo que te gustará que alguien continúe cuidando lo que has logrado con tanto esfuerzo y sin duda mejor que lo haga alguien cercano”, comenta Lorena. Aunque no siempre pensó en seguir el camino que habían comenzado sus padres, ha ido descubriendo lo que más le gusta de continuar con el legado. “Es un trabajo muy dinámico y comienzas cada día sin saber lo que vas a hacer. Puede que te toque estar muchas horas delante del ordenador haciendo cosas, puedes estar atendiendo a la clientela o puedes tener que hacer ambas. Vamos, que aburrir no te aburres”, concluye.
Trayectoria
Siguiendo las recomendaciones familiares estudió Administración y Dirección de Empresas y Derecho y es la segunda generación que regenta Muebles Merke. No siempre pensó en trabajar en el negocio familiar ligado al mundo de los muebles, pero después de ver las condiciones del mercado laboral para los jóvenes y trabajar en otros lugares, decidió dar el paso y trabajar “en casa”.
Futuro
“Hay que ser un poco ambiciosas en esta vida y mi hermana y yo lo somos, así que esperamos seguir creciendo pasito a pasito, para que mi padre se sienta orgulloso y que vea que su esfuerzo ha valido la pena”, señala.
