Euskadi extenderá el cheque bebé universal con un plus de cien euros al mes para las familias numerosas a partir del tercer hijo. Como en los partos sin ecografía, el proyecto de decreto de ayudas a las familias con hijas e hijos que acaba de sacar a exposición pública el Departamento Igualdad, Justicia y Políticas Sociales llega con sospresa. Hasta ahora, se sabía que el Gobierno vasco va a otorgar una ayuda de 200 euros a todas las familias por cada hijo que tenga hasta los tres años, con independencia de sus ingresos. Además, el borrador de la norma extiende la ayuda entre los 4 y 7 años por la mitad de la cuantía a partir del tercer hijo.

Fuentes del Gabinete que lidera Beatriz Artolazabal han aclarado a NTM que, en realidad, las familias numerosas ya disfrutaban de una ayuda económica a partir del tercer hijo. Las novedades que introduce el nuevo decreto serían la cuantía de la subvención y la forma de pago. “Hasta ahora las familias numerosas cobraban 400, 500 o 900 euros anuales por hijo, mientras que ahora cobrarán 100 euros cada mes, es decir, 1.200 euros al año”, aseguran las mismas fuentes. Con estas ayudas a la construcción familiar, el Gobierno vasco pretende acercarse al objetivo de incrementar la tasa de natalidad un 15% en 2030, tal y como se establece en la Estrategia Vasca 2030 para el Reto Demográfico aprobado en junio por el Ejecutivo de Gasteiz.

No es para nada un objetivo sencillo de alcanzar, teniendo en cuenta que Euskadi se encuentra entre los países que ofrecen los datos más bajos de fecundidad y natalidad. En concreto, en el quinquenio 2012-2017 el número de nacimientos en la Comunidad Autónoma Vasca fue de 7,8 nacimientos por cada mil habitantes, la segunda tasa más baja de la Unión Europea, solo por detrás de Italia. La tasa en el Estado español es de 8,4 y la media de la Unión Europea es de 9,9. Los países con mejores datos son Irlanda con una media 12,9 nacimientos por cada mil habitantes; Suecia, con 11,5; y Reino Unido y Francia, con 11,4.

RETRASO DE LA MATERNIDAD

Uno de los factores –junto a otros de índole social, cultural y económico− que se vincula a la disminución de la natalidad en los últimos años ha sido el progresivo retraso de la maternidad. La edad media de las mujeres al nacer su primer hijo o hija ha aumentado en los últimos años en toda Europa. Los Estados miembros con la media de edad más alta en el nacimiento del primer hijo o hija en 2017 fueron Italia (31,1), Estado español (30,9) y Luxemburgo (30,8). La edad media con la que las mujeres vascas tienen su primer hijo o hija es de 32,63.

Con el objetivo de revertir esta tendencia negativa y obrar el milagro de elevar un 15% la tasa de natalidad, el Gobierno vasco ha propuesto tres actuaciones concretas. La primera es el incremento de las ayudas directas por hijo o hija a cargo, que en 2023 absorberá 123 millones de euros. Es la ayuda de 200 euros al mes por hijo o hija hasta los tres años. Esta subvención será compatible con las prestaciones actuales a las familias numerosas entre los 4 y 7 años, con las deducciones fiscales actuales, y con las ayudas por hijo o hija de la RGI. La segunda ayuda es la gratuidad de la etapa de 0-2 años. El consejero de Educación, Jokin Bildarratz, anunció la semana pasada que su Departamento ha ampliado la financiación del Consorcio Haurreskolak del año que viene en 7 millones de euros para cubrir la matrícula, en aras de fomentar la conciliación y la universalidad de la educación. La tercera pata del paquete son los programa de préstamos para proyectos de emprendimiento, formación o vivienda de personas jóvenes.

NATALIDAD EN EUSKADI


PANORAMA.

El Gabinete de Prospección Sociológica del Gobierno Vasco hizo público el 16 de mayo de 2022 un estudio centrado en las percepciones y actitudes de la población de Euskadi ante el reto demográfico. El trabajo de campo se realizó entre los días 28 de marzo y 1 de abril de 2022 y se realizaron un total de 1.202 encuestas telefónicas. Este estudio y este conjunto de datos vinieron a confirmar y actualizar las tendencias detectadas en anteriores estudios y encuestas. Ratifican también la relevancia estratégica de la cuestión demográfica y de su prioridad en la perspectiva de las próximas décadas. Las siguientes son sus principales conclusiones.


NATALIDAD BAJA: MENOS HIJOS E HIJAS DE LOS DESEADOS

Ante la pregunta sobre hasta qué punto se adecúa el número real de hijos/as que se ha tenido con el ideal, un 52% afirma que ha tenido menos hijos/as de los que le gustaría tener o le habría gustado tener. Entre los 18 y 29 años ese porcentaje asciende hasta el 81%, aunque de ellos, al menos, el 54% espera tenerlos en el futuro. Un 10% de la población afirma que “le gustaría tener o le habría gustado tener 0 hijos/as”, este porcentaje era del 5% hace seis años. Entre las y los jóvenes de 18 a 29 años esta afirmación es suscrita por el 15%. En definitiva, ha crecido la actitud renuente a la maternidad y paternidad. No obstante, la media de las personas encuestadas sitúa el número ideal de hijos/as en 2,2. La tasa de natalidad en Euskadi es de 1,28 hijos/as por mujer.


MATERNIDAD O PATERNIDAD MÁS TARDÍA

En cuanto a la edad que se considera más adecuada para tener el primer hijo/a, la media de todas las respuestas obtenidas sitúa esta referencia en los 28 años. Sin embargo, la edad media con la que las mujeres vascas tienen su primer hijo o hija en Euskadi es de 32,6.


EMANCIPACIÓN CON CINCO AÑOS DE RETRASO

Emancipación con cinco años de retraso de lo planeado Una de las razones por las que se tienen hijos/as más tarde de lo deseado es el hecho de que las y los jóvenes se emancipan a una edad más tardía. Las y los vascos opinan que la edad media ideal para emanciparse son los 25 años. Sin embargo, la edad media de emancipación de la juventud vasca es de 30,2 años.


EL DEMOGRÁFICO, UN RETO PARA LA SOCIEDAD VASCA

Entre los retos de futuro planteados a la ciudadanía, los problemas demográficos son considerados como uno de los más importantes, con un 7 sobre 10 en la escala de “gravedad”. Solo se sitúa detrás de “las desigualdades sociales y la pobreza” (7,1).


SOLUCIONES Y PROPUESTAS DE LA CIUDADANÍA

Las soluciones que plantea la ciudadanía tienen dos orientaciones principales. Primero, empleo (creación de empleo, 23% y empleo de calidad, 14%); y, segundo, apoyo a la construcción de familias (ayudas económicas, 17%, y fomento de la natalidad, 12%). Dos tercios de la población (65%) cree que la llegada de población inmigrante puede ser también parte de la solución al problema del envejecimiento de la población. Una proporción similar de la ciudadanía (64%) cree que la medida más eficaz para hacer frente a la posible falta de mano de obra.