Se ha logrado una participación del 65% en el programa

En el tratamiento de esta dolencia, de evolución lenta y sin apenas síntomas, resulta vital su detección temprana

nekane lauzirika

vitoria. Cada año, unas 1.700 personas son diagnosticadas de cáncer colorrectal en Euskadi, de las cuales 300 fallecen. Este tumor es el más frecuente entre la población vasca: el segundo en las mujeres, tras el cáncer de mama, y el tercero en los varones, tras los de próstata y pulmón. Con el fin de lograr rebajar hasta en un 33% la mortalidad producida por esta dolencia, Osakidetza puso en marcha en el verano de 2008 un programa para detectar de forma precoz el cáncer colorrectal -en los primeros estadios cuando la enfermedad no presenta síntomas-. El objetivo era diagnosticar en las primeras fases 1.200 cánceres y lesiones precancerosas cada año.

El programa del Departamento de Sanidad perseguía llegar a lo largo del presente curso a los 496.179 vascos de entre 50 y 69 años, la franja de mayor incidencia de este tipo de tumor. Para ello, Osakidetza comenzó a enviar a los domicilios -se seleccionaron determinadas comarcas de los tres territorios históricos- un kit con un test no invasivo para poder detectar sangre oculta en heces, una medida de detección rápida que puede reducir la mortalidad del cáncer colorrectal entre un 25% y un 33%.

A pesar de que los resultados han sido excelentes, el programa no se extenderá, como estaba previsto inicialmente, a lo largo de este año a toda la población vasca susceptible de hacerse el test. La falta de inversiones y la escasez de especialistas en digestivos para realizar las endoscopias son los motivos principales de este retraso. "En 2011 llegará al 60% de la población de Euskadi, aunque invitaremos a la segunda vuelta a los que se hicieron la prueba en 2009 y cuyo resultado fue negativo", reconoce Isabel Portillo, coordinadora del programa, quien a pesar de no cumplirse las expectativas marcadas se encuentra muy satisfecha con los resultados. "Somos envidiados por muchos países europeos y vamos muy por delante de comunidades próximas". ¿Por qué nos envidian? "Porque la participación en el programa de cribado ha sido muy alta", contesta.

Tumores detectados La Sanidad vasca extendió en 2010 el programa para la detección del cáncer colorrectal a 134.000 personas. En la anterior fase, 30.000 se hicieron la prueba y, de éstas, entre un 3% o un 4% presentaron alguna lesión grave: 59 cánceres colorrectales y 414 lesiones con muchas probabilidades de convertirse en un carcinoma en dos o tres años. El pasado año se detectaron 190 tumores colorrectales en estadios iniciales.

¿Y cuándo llegará a toda la población vasca? "Si todo va como está previsto confío que para finales de 2012 o principios de 2013 el programa se haya extendido a todos los hombres y mujeres de Euskadi de entre 50 y 69 años", afirma. Aunque no se han cumplido del todo los retos marcados, sí se están dedicando importantes esfuerzos económicos. "Se están renovando equipamientos, se han puesto en marcha salas de endoscopias... ¿Qué podíamos ir más deprisa? Supongo que sí, pero tampoco tenemos tantos especialistas en endoscopias para poder contratarlos", explica Portillo. "El programa está teniendo un gran éxito entre la población. Hemos alcanzado una participación del 65%. Está por encima de nuestras expectativas y por delante de países con mayor tradición e implantación de este tipo de acciones preventivas como el Reino Unido, donde la respuesta ha sido del 50%. También aventajamos a otras comunidades del Estado. En estos momentos somos envidiados. No lo decimos nosotros, sino la Alianza de Lucha contra el Cáncer que nos cita como ejemplo de participación. Se ha conseguido que la población haga suyo el programa", apunta.

En Euskadi, al año son diagnosticados unos 1.700 tumores colorrectales. Es una enfermedad de evolución lenta -unos diez años- y asintomática, por lo que en muchos casos el diagnóstico es tardío, cuando la dolencia está muy extendida y poco se puede hacer. Por ello resulta vital la detección temprana y la prevención para no desarrollar la enfermedad o cogerla a tiempo para que los tratamientos sean eficaces.

Los envases con las muestras recogidas por el test. Foto: o.M.