El órdago de Junts a Pedro Sánchez con la paralización de la ley de amnistía amenaza con hacer tambalear la legislatura. El partido de Carles Puigdemont advierte de que el Gobierno del Estado estaría incumpliendo los acuerdos alcanzados y da un plazo de quince días para reconducir la situación mientras el resto de socios de investidura reprochan a la marca independentista una “incomprensible jugada” con la que se asume un riesgo impredecible. “Si no se mueven aquí y no quieren que haya una ley blindada, integral y de aplicación inmediata, no estarán cumpliendo con lo que acordamos”, ilustró el secretario general de JxCat, Jordi Turull, que negó pronunciarse en un tono de amenaza pero que reclamó concentrarse en buscar “soluciones” para tejer un redactado del texto compatible con sus demandas. Para ello, ya ha contactado con el secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, manifestando su voluntad de sentarse en la mesa y conminándole a “no dejarlo para el último minuto”. Ocurre que se antoja complejo que Sánchez dé un paso al frente con las elecciones gallegas en el horizonte, el 18 de febrero. Mientras, la Mesa del Congreso deberá decidir en su reunión de la próxima semana el plazo para volver a negociar la iniciativa.

Turull aludió en RAC1 a que se han abierto “vías de agua que hay que blindar y tapar”, refiriéndose a los autos judiciales que persiguen dejar en pañales la normativa, si bien el resto de fuerzas le señalan que no se puede estar legislando a golpe de titulares periodísticos o de procedimientos que abran o fabulen los magistrados, como ocurre con en el caso Tsunami o la trama rusa con los que quieren acorralar a Puigdemont. “Tal y como está el texto ahora, con unos tribunales normales, la ley sería buena. Pero ante lo que hemos visto estos dos meses y medio, un manual para boicotear la ley con relatos delirantes, tenemos la oportunidad de blindarla mucho más”, insistió el líder de Junts, ya que podrían quedarse fuera de la amnistía muchas causas abiertas, algunas vinculadas con los CDR o la Operación Judas. “Si ves todo esto, ahora que tenemos la oportunidad de reforzarlo y tapar estas vías de agua que han abierto a golpes de martillo, hagámoslo”, insistió Turull, tras añadir que el cambio de posición de la formación se debe a jueces como Manuel García-Castellón y Joaquín Aguirre.

“No se puede poner en riesgo una ley necesaria para acabar con el dolor de cientos de personas”

Pere Aragonès - President de la Generalitat

El resto de socios de Sánchez no entienden que una norma que salió de la Comisión de Justicia sólida se vea frenada en su urgencia al tener que volver a negociarse durante las próximas semanas. Aunque ERC evitó entrar en el reproche público a Junts, el president Pere Aragonès hizo una llamada a la responsabilidad. “La ley de amnistía es una ley necesaria y no debe ser puesta en riesgo, la necesitamos para poder acabar con el dolor que están sufriendo centenares de personas en Catalunya”, verbalizó, emplazando a “abrir una etapa de negociación, diálogo y discusión sobre la soberanía”, así como de restauración de los derechos y libertades de todos los ciudadanos catalanes. La vicepresidenta del Govern, Laura Vilagrà, subrayó que es una norma que “necesitan miles de personas, como activistas o alcaldes, no solo las más famosas que siempre citamos”. 

Por su parte, la portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua, aseguró en Radio Euskadi que “aún estamos a tiempo de revertir la situación y confiamos en que finalmente se llegue a un acuerdo porque, desde nuestro punto de vista, hay mucho más que perder que ganar”. “No podemos sucumbir a presiones y no podemos aceptar que haya poderes del Estado que marquen el paso a la política”, puntualizó la dirigente de la coalición soberanista. A su vez, el PNV, el diputado Mikel Legarda, que es portavoz en la Comisión de Justicia, lamenta que se alargue la negociación aunque en cualquier caso apuesta por un resultado positivo. 

Moncloa, por ahora, no cede

Moncloa, de momento, hace ver su intención de no introducir modificaciones. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, afirmó que “se va a mantener así” porque para el Gobierno ya es impecable, “absolutamente constitucional y conforme al Derecho europeo”, además de que “no se puede improvisar a cada minuto”. La ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, cree que “Junts se ha equivocado” ya que “es un texto que habíamos trabajado de la mano y donde no fue sencillo alcanzar el acuerdo”, censurando a JxCat por “coincidir con aquellos que quieren bloquear esta norma, con aquellos que nunca estuvieron de acuerdo en avanzar en esa normalización, con aquellos que los quieren perseguir desde el punto de vista jurídico, amenazando con legislación para hacer ilegal su partido político”. Además, la portavoz del PSOE, Esther Peña, calificó el voto en contra como una “traición a Catalunya” e instó a Junts a cambiar su posición y “no estar siempre echándose al monte”.

Desde la oposición, el portavoz del PP, Borja Sémper, exigió a Sánchez a que aclare si mantendrá su “línea roja” y la ley de amnistía no incluirá la alta traición. “Debe decirnos hoy mismo al conjunto de los españoles si la línea roja de ayer será ya una línea invisible mañana porque en este momento solo hay tres opciones para el señor Sánchez: O Puigdemont cede, o Sánchez traga, o, como dice Junts, colorín colorado”, enfatizó.

Puigdemont

  • Reelección en el Consell. Carles Puigdemont optará a la reelección como presidente del Consell per la República -organismo que lidera desde Bélgica -, en las elecciones a la presidencia de la entidad soberanista que se celebrarán del 5 al 14 de febrero.
  • El exJefe del Govern deberá competir con Jordi Castellà, abogado y concejal de Primàries en Canet de Mar (Barcelona) y con el periodista Lluís Felipe Lozano. La proclamación definitiva del nuevo presidente se producirá el próximo 24 de febrero.