- La Generalitat concedió ayer el tercer grado a los nueve soberanistas catalanes condenados por el procés, con lo que solo tendrán que ir a la cárcel a dormir entre semana, una medida que se aplicará de forma inmediata pero que podrá ser revisada por el Tribunal Supremo. Según informó el Departamento de Justicia, el Servicio de Clasificación de la Secretaría de Medidas Penales ratificó ayer la propuesta de las juntas de tratamiento de las cárceles de Lledoners, Puig de les Basses y Wad Ras que, de forma unánime, apostaron el pasado 2 de julio por conceder el tercer grado a los líderes del procés, condenados por el Tribunal Supremo por delitos como sedición y malversación.
De esa forma, el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras, los exconsellers Joaquim Forn, Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva y Dolors Bassa, la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y los Jordis -Sànchez y Cuixart- solo tendrán que ir a dormir a la cárcel y podrán pasar los fines de semana en casa.
La reclasificación en tercer grado se ha notificado ya a los presos, por lo que se hará efectiva en cuanto las juntas de tratamiento de cada uno de los centros donde están internos señalen la fecha de aplicación del régimen abierto, los horarios a que estarán sujetos los reclusos y, si es necesario, los cambios en las actividades que llevan a cabo fuera de los centros.
La Fiscalía había recurrido hasta ahora la flexibilización del régimen penitenciario de los líderes condenados por el procés en virtud del artículo 100.2, por lo que es previsible que también lo haga en el caso del tercer grado, pero la semilibertad solo quedaría en suspenso por orden judicial. A diferencia del 100.2, en que de acuerdo con el criterio jurídico mayoritario los recursos se agotan en la Audiencia de Barcelona, la última palabra respecto al tercer grado la tendría el Supremo como tribunal sentenciador.