El secretario general de la ONU, António Guterres, no quiso comentar la orden de arresto emitida este viernes por la Corte Penal Internacional (CPI) contra el presidente ruso Vladímir Putin, por su presunta responsabilidad en la deportación de niños ucranianos.

"La CPI es una institución independiente del secretariado (de las Naciones Unidas) y no comentamos sus decisiones", dijo el viernes en su rueda de prensa diaria Stéphane Dujarric, portavoz del secretario general António Guterres.

El portavoz fue preguntado repetidamente sobre las consecuencias que esta orden de arresto puede tener, por ejemplo ante una eventual visita de Putin a algún foro de la ONU, pero respondió que no quería "responder a hipótesis".

Sobre si el propio Guterres aceptaría reunirse con Putin en este momento, cuando hay vigente esa orden de arresto, se mantuvo en el mismo tono: "El secretario general hablará con quien tenga que hablar para hacer avanzar los temas que tiene sobre la mesa".

La CPI emitió este viernes una orden de arresto contra Putin, como "presunto responsable" de la deportación ilegal de niños ucranianos y su traslado de zonas ocupadas en Ucrania a Rusia, lo que supone un crimen de guerra según el tratado de este tribunal, el Estatuto de Roma.

La sala de cuestiones preliminares de la CPI también emitió una segunda orden de detención contra la política rusa María Lvova-Belova, comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, con la misma acusación.

Ambas órdenes de detención son las primeras de su tipo que emite la CPI en el contexto de su investigación de crímenes en la guerra en Ucrania.