LA HAYA. El presidente del alto tribunal de la ONU, Peter Tomka, indicó que para formalizar una acusación por genocidio "es necesaria la intención deliberada de matar a miembros de un grupo, ya sea física o psicológicamente".
La CJI finaliza hoy el caso que ha enfrentado a Croacia y Serbia desde 1999 por presunto genocidio cometido entre 1991 y 1995, durante las guerras de descomposición de la antigua Yugoslavia.