Coreano arraigado en Europa

Bilbao - En plena era de la globalización, mientras los constructores europeos buscan abrir mercados expandiéndose hacia Asia, Hyundai consolida su implantación en el Viejo Continente. Cuando la firma coreana tomó la decisión de instalarse en occidente lo hizo con todas las consecuencias: creó un centro de I+D en Alemania y se estableció como fabricante en la República Checa. El objetivo era y es diseñar y producir automóviles a la medida del público europeo. Esa presencia se traduce hoy en 152.000 puestos de trabajo, directos e inducidos. Las actividades de Hyundai generaron en 2012 1,3 millones de euros en impuestos.

Los datos aparecen en un informe elaborado por la reputada consultora London Economics y reflejan la creciente contribución de la compañía asiática a Europa. El empleo promovido por sus operaciones aumentó un 18% de 2011 a 2012. En ese mismo periodo, los tributos a los distintos erarios locales (incluyendo derechos de aduana, impuestos de ventas y de ingresos) ascendieron un 38%. La fábrica que la compañía posee en Nosovice, República Checa, adquiere anualmente suministros por valor de 3,1 millones de euros; el 65% de dicha inversión recae en proveedores europeos.

El estudio de London Economics señala que Hyundai también origina un valor añadido de 2,3 millones de euros a través de áreas como fabricación, equipos, investigación y desarrollo, ventas y distribución. Estima que este valor adicional revertirá en siete millones de euros en la producción y 115.000 nuevos puestos de trabajo en la región.

El año pasado la compañía ha invertido en Europa más de 500 millones de euros. Esos fondos se han destinado al centro de pruebas junto al Circuito de Nürburgring y a la sede de Hyundai Motorsport en Alzenau, ambos en Alemania. Además se ha ampliado la oficina central de Frankfurt, así como la planta turca en la que se fabrica el nuevo modelo i10. El 95% de los coches que Hyundai vende en Europa se diseña y desarrolla aquí; el 90% se ensambla en República Checa y Turquía.

La multinacional asiática prepara un plan de expansión que dispare sus matriculaciones en el continente europeo a partir de 2015. Para lograrlo, la compañía va a aplicar mejoras cualitativas y cuantitativas a su repertorio. Entre el año próximo y 2020 pondrá en escena veintidós nuevos productos, ofensiva comercial cuyo objetivo es alcanzar una cuota de penetración del 5% en Europa.