El mercado inmobiliario vasco está lejos de las alegrías del año pasado. Pese a que las 1.887 hipotecas sobre viviendas constituidas en junio suponen un avance del 8,1% respecto al mes precedente, la cifra representa un descenso del 21,8% en comparación con el mismo mes del año pasado. Es un retroceso muy similar al experimentado en el conjunto del Estado (-21,9%), según la estadística difundida ayer por el INE. Mientras, el euríbor cerró agosto con su primera caída en año y medio, pero aún por encima del 4%, un porcentaje que está encareciendo de forma severa las hipotecas a tipo variable. 

Los datos apuntan a una tenue recuperación en Euskadi en comparación con las caídas interanuales de los meses de abril y mayo (33,2% y 25,7%), pero lo cierto es que apenas aguantan el análisis respecto al año pasado. Sin embargo, es preciso reconocer que las cifras del primer semestre de 2022 reflejaban un crecimiento imprevisto, fruto de la aún todavía vigente política de tipos de interés bajos y una situación en la que el ahorro acumulado por muchas familias durante la pandemia animaron el mercado. En lo que se refiere al capital prestado, los parámetros son similares. Así, la cantidad concedida por las entidades alcanzó los 324,8 millones de euros, un 12,7% más que en el mes de mayo, pero un 18% menos que el mismo mes del año pasado.

A nivel estatal, la firma de hipotecas subió un tímido 0,2% respecto al mes anterior, pero disminuye un 21,9% en comparación con junio de 2022. Canarias, con un 5,4%, es la única comunidad en la que se produce una variación interanual positiva. Por contra, los mayores descensos se registraron en La Rioja (-64,7%) y Castilla y León (-41,2%). Es el quinto mes consecutivo de descensos en tasa interanual en el Estado, y el cuarto con dígitos superiores al 20%. Basta con ver el resumen de datos del primer semestre: en la primera mitad del año el número de hipotecas para comprar una vivienda se ha reducido un 13,7% y el capital prestado para ello, un 15%. Por otra parte, el importe medio actual de una hipoteca es de 143.796 euros, lo que supone un 0,7% menos que hace un año, con un plazo medio de devolución de 24 años.

Las subidas de tipos de interés -que en un año han pasado del 0% al 4,25%- han afectado al mercado inmobiliario, así como los aumentos en el precio de venta de los pisos. 

Hoy se conoció, asimismo, que esta tasa terminó el mes de agosto con la primera caída en año y medio, al pasar del 4,14% de julio al 4,07% de agosto. Pero el avance interanual es enorme, ya que el año pasado por estas fechas estaba en el 1,2%. La banca promovió la contratación de hipotecas a tipo fijo, sabedora de que la subida del euríbor iba a desinflar la firma de hipotecas a tipo variable. Lo que pasa es que esas hipotecas a tipo fijo han incrementado su tipo de interés medio, que es ya del 3,45%, mientras que las variables están por debajo (2,84%). Esto ha hecho que de nuevo vuelvan a ganar terreno estas últimas. La clave va a estar en la evolución futura del euríbor. Para Simone Colombelli, director de hipotecas del comparador financiero iAhorro, “agosto es un mes de bajadas porque se paraliza todo y lo más probable es que haya repuntes del euríbor a partir de septiembre”.