- El Gaztedi cayó en Gamarra este domingo ante uno de los gallos de la Liga. El conjunto vitorianos acabó sucumbiendo al pronóstico y perdió (14-18) ante el Hernani aunque al menos consiguió el objetivo de competir y plantar cara a los guipuzcoanos durante muchos minutos del partido.

El Hernani llegaba a Gamarra como colíder invicto y, por momentos, vio peligrar un partido que comenzó con una foto de hermandad en contra de la lacra que supone para la sociedad la violencia machista. Además, se llevó a cabo un minuto de silencio en nombre de las victimas de la pandemia.

Una vez conclusidos los preliminares, el Gaztedi se dispuso a dominar territorialmente poniendo presión en el campo. El Hernani, con mucho oficio, aguantaba el tirón evaluando a un rival que tenía todo por demostrar ante un recién descendido de DHA.

El Hernani, fruto de ese control que solo el oficio da, inauguró el marcador aprovechándose del primer fallo de concentración del Gaztedi. El apertura del Hernani marcaba un ensayo que daba sentido a la tensión del partido.

El equipo visitante, ya más tranquilo y asentado sobre el terreno de juego, hacía visible cada carencia del equipo local. Cada fallo de coordinación gasteiztarra suponía un duro castigo en el marcador y así llegaron los ensayos de Abecia y Etxeberria que colocaban un preocupante 0-19 en el marcador, pese al empuje de los rojinegros.

El comienzo de la segunda parte resultó frenético por parte de un Gaztedi enrabietado por la inutilidad de sus esfuerzos. Un ensayo de Josu Carrillo en el minuto 8 de la reanudación recompensaba los esfuerzos locales (7-19).

Pero la alegría y la esperanza duraron muy poco. Al saque de centro, el Hernani aprovechó un nuevo error de concentración vitoriano y marcó un ensayo, desde su 22, pleno de la magia que solo los grandes son capaces de aplicar.

El Gaztedi siguió insistiendo pese a lo adverso del resultado. Fruto de sus acometidas llegó un golpe a 5 metros de la línea de ensayo que merecía el Gaztedi, dominador de la melé durante todo el partido. El partido se endurecía por momentos pero el experto Hernani explotaba cada una de las faltas de los locales (7-31).

Winrey, el apertura del Gaztedi, aún rompió la línea de defensa y, pese a soportar hasta tres placajes, logró llegar a la línea de ensayo para colocar un todavía esperanzador 14-31. Pero el Hernani logró un postrer ensayo a su favor que sellaba, con su transformación, el 14-38 definitivo.