Muguruza cede en el torneo de Miami ante la pujanza de Stephens

miami - Garbiñe Muguruza sigue teniendo un muro en los octavos de final del Premier Mandatory de Miami y ayer volvió a chocarse con él. En realidad, quien frenó la breve trayectoria de la de Caracas en el torneo fue Sloane Stephens, número doce del mundo, que ahora mismo está un punto por encima de Muguruza y se impuso por 6-3 y 6-4. La estadounidense estaba en su superficie favorita y la vasco-venezolana sabía que tenía que estar muy fina para ganar. No fue posible porque en este tramo del año es una jugadora atenazada por las dudas en los momentos cruciales de los partidos y, por culpa de algunas derrotas inesperadas, falta de ritmo.

Ante otra rival, puede acabar imponiéndose, pero una ganadora de Grand Slam, como es Stephens, no perdona tantas oportunidades desperdiciadas. Garbiñe Muguruza flaqueó en el saque desde el inicio del partido y eso le hizo ir a remolque continuamente y no pudo encontrar una línea fiable en su juego. Cedió sus tres primeros turnos de servicio y eso puso en bandeja el primer set a Stephens, que es explosiva y resulta difícil de desbordar. Muguruza lo intentó, pero tuvo que arriesgar y forzar demasiado y acumuló errores no forzados, hasta 32 al final de partido.

En el segundo set hubo más equilibrio, aunque la de Caracas también perdió su saque cuando podía poner el partido de su lado. Al final, lo cedió cinco veces en nueve oportunidades. En cambio, ella solo aprovechó tres de las ocho bolas de ruptura que tuvo y falló por exceso cuando tuvo algunas bolas francas lo que terminó de decantar el partido. “No creo que ella haya jugado un tenis excepcional. La derrota se debe más a que he fallado bolas que tenía que haber pensado mejor. No me he encontrado mal, pero ella ha estado mejor en los puntos claves”, comentó Muguruza, que seguirá sobre pista dura la próxima semana en Monterrey, una cita nueva en su calendario en la que será primera cabeza de serie y en la que buscará algunos puntos para el ranking, pero sobre todo partidos, ritmo y confianza. Después, jugará la eliminatoria de la Copa Federación ante Paraguay antes de afrontar la gira de tierra batida.

Fuera ya de Miami las tres primeras tenistas del mundo, Sloane Stephens jugará ante Angelique Kerber, que sufrió para eliminar a la china Yafan Wang, en cuartos de final. A esa ronda también accedió Karolina Pliskova.

En el Masters 1.000 masculino, Pablo Carreño accedió a los octavos de final tras vencer de forma convincente a Steve Johnson. Lo mismo logró Fernando Verdasco, que bajó de la nube a Thanasi Kokkinakis, el verdugo de Roger Federer. Milos Raonic parece resurgir y dejó fuera de combate a Diego Schwartzman.