Bilbao - Alex Txikon no pierde el tiempo. El alpinista de Lemoa, que partió del aeropuerto de Loiu el pasado domingo, 24 de diciembre, llegó el lunes a Katmandú, capital de Nepal, y ya apunta al Campo Base del Everest (8.848 metros). El vizcaíno pretende realizar un trekking de aproximación a la zona de confort del Techo del planeta, situado a 5.364 metros.

Así las cosas, el equipo que capitanea el montañero lemoarra, en el que se encuentra el pakistaní Ali Sadpara, tiene previsto arribar a la primera estación del ochomil entre el 1 y el 3 de enero.

Después, el bloque tendrá que pasar unas semanas de aclimatación en las que tratarán de adaptar el físico a las condiciones extremas del Everest y analizarán in situ el estado de la montaña. Asimismo, si continúan con los planes establecidos anteriormente, dicha estancia estará salpicada de trabajo para acondicionar la ruta elegida por la expedición. El primero de los problemas a solucionar estará anclado en la Cascada del Khumbu, una zona de seracs muy peligrosa que abre el paso desde el Campo Base.

Alex Txikon afrontará su segundo intento del Everest invernal y sin oxígeno en una aventura en la que contará con un grupo reducido y en la que el viento será el “principal problema”, a juicio del propio lemoarra. Las ráfagas en días de cumbre podrían llegar a alcanzar los “150 kilómetros por hora”, lo cual transforma en peligrosísimo el tratar de hollar. Además, a pesar de que el vizcaíno ve con “probabilidades” la hazaña, la temperatura rondará los 60 grados bajo cero. Entre las prioridades de Txikon está “no meter tanta carga” en los primeros días, ya que el año pasado acumularon “nueve días de trabajo seguidos” y acabó pasando factura a la cordada. Será principal evitar el desgaste y “guardar fuerzas”. - I. G. Vico