VITORIA - La edición número veinte de la marcha de ultrafondo Hiru Haundiak está en marcha desde la pasada medianoche con la participación de 1.700 montañeros que se enfrentan al reto de encadenar las tras grandes y míticas cimas del montañismo vasco como son el Gorbea, Anboto y Aizkorri. Se trata de una marcha que se desarrolla desde la medianoche entre el viernes y el sábado y finaliza a las 00.00 horas de hoy con el tiempo tope de 24 horas que se marca a todos los participantes. Por el recorrido se atraviesan caminos de baja y media montaña. La distancia a recorrer es de 100 kilómetros, con un desnivel positivo acumulado de 5.126 metros. La prueba transcurre en su mayor parte por parajes de excepcional belleza natural catalogados como parque natural. El recorrido será el siguiente: Ondategi, Gorbea, Ubidea, Otxandio, Urkiola, Anboto, Landa, sierras de Elgea y Urkilla, Urbia, Aizkorri y Araia.
En esta edición el número de inscritos es de 1.721, tras registrarse casi 3.000 interesados en participar en el sorteo celebrado en el mes de enero. Una gran parte de ellos, el 87 %, proceden del País Vasco y el resto de diferentes partes del Estado, junto con 13 personas de otros países como Francia, Alemania, Reino Unido, Australia y Japón. Asimismo hay que destacar el incremento de mujeres participantes en la prueba; casi el 10 % del total, lo que supone el doble que en la edición del pasado año.
Esta prueba se comenzó a organizar en el año 1.987 aunque en la primera década la prueba se celebró con una periodicidad anual. Es a partir de 1996 cuando la organización decide estirar el plazo entre una cita y otra y pasa a celebrarse la Hiru Haundiak cada dos años. El prestigio y reclamo entre los aficionados a esta cada día creciente deporte de las carreras de ultra montaña se ha ido consolidando a lo largo de casi 30 años como una de las pruebas de montaña de referencia en el Comunidad Autónoma Vasca así como el Estado. Asimismo, también es prueba calificativa para la Ultra Trail du Mont-Blanc. Buena cuenta del interés que despierta es que cuando se abre el plazo de inscripción, los dorsales se agotan en cuestión de pocas horas y son muchos los interesados que se quedan a la espera de vacantes para ganarse su dorsal y disputar la prueba. - J. L. del Campo