buenos aires - Lionel Messi aterrizó ayer en Buenos Aires y se mostró confiado en "cambiar el chip" de cara al Mundial de Brasil que disputará el mes que viene con la selección albiceleste tras la mala temporada jugada en el Barcelona. "Sé que ahora llego con la selección, cambio el chip, como muchas veces me pasó al revés, que no me salían las cosas en la selección e iba al Barcelona y jugaba bien. Esperemos que esta vez sea al revés", dijo Messi a la prensa tras aterrizar en el aeropuerto internacional de Ezeiza, a las afueras de Buenos Aires.
"Estoy contento de llegar acá y ya pensar en lo que se viene, en el Mundial, que es algo muy importante para nosotros", contestó el delantero sobre la Copa del Mundo.
Messi reconoció que no fue su mejor año por las lesiones y motivos externos al fútbol y tampoco fue una buena temporada para el club catalán en el que, a su juicio, hubo "un bajón de todo el equipo".
El astro argentino lamentó no haber podido aprovechar la oportunidad de ganar la Liga con el Barcelona en el duelo final contra el Atlético de Madrid pero aseguró que el torneo "terminó de esta manera y hay que pensar en lo que viene".
En similares términos se manifestó otro de los jugadores del Barcelona, Neymar. El delantero brasileño aseguró que está "ansioso por participar en la Copa del Mundo, cumplirlo es un motivo de enorme orgullo y alegría".
En declaraciones a la revista Glamour, Neymar recalcó: "Tenemos jugadores muy cualificados y preparados para vestir la camiseta de la selección. Existe y se crean ciertas expectativas con algunos jugadores, pero en mi caso siempre he convivido con ese tipo de presión".
"Sin humildad no se va a ningún lugar en la vida" dijo. "Ha sido un año de aprendizaje pero también de grandes avances. He aprendido mucho de la directiva del club y de jugadores sensacionales a los que admiro", aseguró sobre su experiencia en Europa. - Efe
