El Benfica portugués arrebató al Inter Movistar español el título de la Copa de Europa de fútbol sala en la prórroga (3-2), en un partido tenso e igualado. La igualdad obligó a disputar una prórroga en la que el Inter desaprovechó dos ocasiones claras antes de que el Benfica marcase su tercer gol por medio de Davi, el mejor del torneo.