Larga es la trayectoria de Su Ta Gar y muchas las ocasiones en las que la banda ha pisado escenarios alaveses a lo largo de ese camino. Aún así, poder ver a la formación hoy se ha convertido en una especie de milagro. Concierto que llevan a cabo, lleno seguro. Es más, las entradas suelen volar. Un claro ejemplo es lo que va a suceder entre este viernes y este sábado con Amurrio y Vitoria como puntos de referencia.
Los de Eibar llegan este día 12 por la noche al gaztetxe de Amurrio y se ha convertido casi en misión imposible encontrar un hueco. Ya el 13, también con la oscuridad reinando en las calles, el viaje seguirá en Hell Dorado, donde no queda ni un ticket desde hace semanas. Y da la impresión de que si el domingo hubiera otra actuación seguida en otro punto del territorio, el resultado sería el mismo.
No hay más que ver los últimos pasos de la banda por, por ejemplo, tablas como las del Urban Rock Concept. En este caso, ni la pandemia ni nada pudo con un concierto que tuvo colgado el cartel de completo desde casi el mismo momento de anunciarse. O en la sala Jimmy Jazz el año pasado, donde volvió a repetirse la misma historia.
'Alarma'
Son ya más de 35 años en la carretera, pero es indudable la pegada que Su Ta Gar sigue teniendo entre el público de distintas generaciones. Su último disco, el duodécimo álbum de estudio, es Alarma, un trabajo que vio la luz en 2022 y con el que la formación sigue girando, sin perder de vista esa ya larga lista de éxitos imprescindibles en su trayectoria.
La llama no se apaga. Todo lo contrario. Sigue más que viva y prendiendo. Sabiendo, además, vivir creando nuevas canciones. La banda está tendiendo el buen criterio de no limitarse a hacer repertorios a partir de tiempos pasados. De hecho, son muchos los que señalan Alarma como un trabajo más que significativo puesto que supone recuperar el pulso de sus mejores momentos creativos.
Lo que es evidente es que el público está respondiendo. Siempre ha contado Su Ta Gar con una parroquia fiel, de eso no hay duda. Pero en los últimos años está sorprendiendo en Álava que cada actuación es un lleno asegurado, da igual la fecha, el horario, el escenario, el precio de la entrada y lo que sea.
