Durante sus últimos años, Picasso, instalado en Mougins, realizó una obra extensísima, casi obsesiva, como si quisiera ganarle la partida al tiempo y crear sin fin. Entre 1966 y 1972, un año antes de morir con 92 años, el artista malagueño comenzó a pintar la serie dedicada a los emblemáticos personajes de la popular novela de Alejandro Dumas Los tres mosqueteros. En concreto, realizó más de 450 lienzos y dibujos, desplegando una enérgica actividad artística cuando ya se encontraba en la cumbre de su carrera y consolidado su prestigio internacional..

El Museo de Bellas Artes de Bilbao ha querido unirse a la conmemoración del 50 aniversario de la muerte del pintor, con una “pequeña pero gran exposición”, que ocupa la sala 20 del edificio antiguo y que se podrá ver hasta el 10 de marzo de 2024. En el marco del programa La Obra invitada, se exponen el lienzo Mousquetaire a la pipe, de la colección del Museo de Arte Contemporáneo del País vasco, Artium –la única pintura de Picasso en colecciones públicas de Euskadi– y Busto de caballero III (1967), de la colección de la Fundación SantanderUna escultura del retrato de un joven Picasso, realizado por Pablo Gargallo, perteneciente al museo bilbaíno, dialoga con las dos obras realizadas por el propio artista malagueño en su etapa final de la vida. 

Uno de los objetivos de la líneas de nuestra política cultural es insistir y ampliar la colaboración entre museos e instituciones culturales de nuestra comunidad. Y en eso estamos, poniendo nuestro empeño a través de diferentes programas. La presencia de una obra tan relevante de la colección de Artium en Bilbao es una muestra de ello, pero quiero también recordar la colaboración que el Bellas Artes ha tenido con Tabakalera, la magnífica exposición que se está celebrando allí con las obras del museo bilbaínova a batir récord de visitas. O la colaboración que estamos impulsando entre las diferentes instituciones públicas o privadas para celebrar el año que viene el centenario del nacimiento de Eduardo Chillida y el de Nestor Basterretxea. Son líneas de trabajo que están plasmadas en nuestro programa estratégico hasta el 2028”, remarcó Bingen Zupiria, consejero de Cultura y presidente del Patronato de la Fundación del Bellas Artes. 

El Bellas Artes se une a la conmemoración del 50 aniversario de la muerte de Picasso Oskar González

Burlando a la vejez y a la muerte

El director del Bellas Artes, MIiuel Zugaza , por su parte, ha mantenido que con esta exposición se celebra “de alguna manera, la supervivencia de Picasso, gracias a la generosidad del Museo Artium de Vitoria, que presta la única pintura del autor que existe en las colecciones públicas de Euskadi. A la generosidad de Artium, le ha respondido la Fundación del Banco Santander redoblando la apuesta y cediéndonos también el único Picasso de su colección”.

Zugaza ha explicado que han estado dudando “en exponer un dibujo de la colección del museo bilbaíno, Merendero, pero al final nos ha parecido mejor convocar al propio Picasso, un retrato que hizo el escultor contemporáneo del artista, Pablo Gargallo. De alguna manera, el joven Picasso se mira cara a cara con el anciano pintor que se muestra detrás de estos personajes, burlando a la vejez y la muerte a través del amor y la creación”.

Por su parte, Beatriz Herráez, directora de Artium, ha recordado que “Mousquetaire à la pipe es una pieza que se adquiere de una manera muy temprana para una colección que ya se va construyendo en los años 60 (del pasado siglo), en una época en que se decide adquirir obra de carácter contemporáneo de autores principalmente vascos y españoles”.

Este óleo sobre tela, fechado en 1968, se incorporó al patrimonio cultural de la Diputación Foral de Araba en 1979, y desde 2002 la pintura está integrada en la colección del centro vasco, donde es una de sus piezas clave. La obra representa una figura cómodamente sentada, casi sesteando, con las piernas cruzadas y fumando una pipa.

‘Mousquetaire à la pipe’ pertenece a una época en la que Picasso revisa algunas obras fundamentales del arte contemporáneo y centra su actividad pictórica en la mujer y la relación hombre-mujer. Este mosquetero, cargado de ironía sobre el papel masculino, está realizado con gran sencillez y, a pesar de ello, enorme expresividad.

El Bellas Artes se une a la conmemoración del 50 aniversario de la muerte de Picasso Oskar González

María Beguiristain, directora de Arte y Exposiciones de la Fundación Banco Santander, ha recordado que el programa La Obra invitada se viene desarrollando en el museo bilbaíno desde 2001. Durante este tiempo, se han podido ver obras de El Greco, Van Dyck, Zurbarán, Lucas Cranach el Viejo o Cristina Iglesias cedidas por la entidad bancaria.

En esta ocasión, se ha prestado Busto de caballero III (1967), que Picasso pintó con 85 años y en un solo día, en apenas cien trazos, sin rectificaciones. 

Las tres obras se pueden ver en el Bellas Artes de Bilbao hasta el 10 de marzo de 2024. La entrada es gratuita hasta que finalicen las obras de ampliación.