- El Festival de Jazz de San Sebastián ha cerrado el programa de su 56ª edición con las incorporaciones del cantante José James y del pianista Chucho Valdés, quien además recibirá el premio Donostiako Jazzaldia, con el que se reconocerá su trayectoria casi 20 años después de galardonar a su padre, Bebo Valdés.
Ambos músicos sustituyen a Arlo Parks y Mulatu Astatke, residentes en Gran Bretaña, que han tenido que cancelar sus conciertos por la obligación de guardar cuarentena a su regreso del festival donostiarra, que este año recibirá, entre otros, a Brad Mehldau, Cécile McLorin Salvant, Silvia Pérez Cruz, Kenny Barron, Dave Douglas, Noa, Jorge Pardo, Buika, Gonzalo Rubalcaba, Bill Frisell y Marc Ribot. Un total de 60 conciertos, de los cuales 29 serán gratuitos, conforman una edición aún marcada por las medidas anticovid y que su director, Miguel Martín, definió ayer como “absolutamente extraordinaria y brillante”, de “una gran calidad artística” y una de las “más importantes y atractivas de los últimos años”.
Chucho Valdés sustituirá a Mulatu Astatke en la plaza de la Trinidad el 22 de julio, segunda jornada de un Jazzaldia que había agotado ya las entradas para este concierto, así que quienes deseen escuchar al pianista cubano sólo podrán hacerlo si hay devoluciones tras la cancelación de la actuación del músico etíope. A Valdés, que junto a sus hermanos Maira y Rickard asistió en 2003 a la entrega del Donostiako Jazzaldia a su padre, el Festival de San Sebastián le profesa “afecto y devoción”. “Es uno de los músicos más admirados y reconocidos no sólo del jazz latino, es uno de los iconos de la música al que respetan aficionados y músicos de todos los estilos”, destacó Martín. Pero el cubano no es el único premiado de este 2021, ya que también se distinguirá a la big band catalana La Locomotora Negra, que este año, en su 50º aniversario, ha decidido subir a los escenarios por última vez.
La otra novedad de la programación el ecléctico vocalista estadounidense José James, que debutó en el Jazzaldia en 2016 y ahora regresa para sustituir a Arlo Parks en el auditorio del Kursaal en el primer día de esta edición que, como en la pasada, prescinde del Jazz Band Ball inaugural con los conciertos gratuitos de la playa de la Zurriola.
El festival, que se clausurará el 25 de julio, ha vendido sus entradas “a tal velocidad”, dijo Martín, que ya ha agotado los abonos disponibles para la plaza de la Trinidad, el auditorio del Kursaal y el museo San Telmo.
El cartel de no hay entradas se ha colgado asimismo para tres conciertos de la Trini, los de Noa, Brad Mehldau y Bill Frisell, así como el citado de Chucho Valdés; para el de Silvia Pérez Cruz en el Kursaal, y para los de Marcin Masecki, Marco Mezquida e Iñaki Salvador en San Telmo.
El 56º Jazzaldia se repartirá por ocho escenarios, entre ellos Chillida Leku, donde Cécile McLorin Salvant, que estará en el primer día de la Trinidad, protagonizará una jornada prólogo el 18 de julio. Además, por primera vez, San Sebastián acogerá otro “festival en sí mismo”, Jazzeñe, que tras Madrid, Zaragoza, Valencia y Málaga, ocupará en su séptima edición el escenario del Victoria Eugenia, por donde pasarán del día 21 al 25 Chano Domínguez Trío y otros siete grupos seleccionados para este ciclo de la Fundción SGAE cuyo objetivo es la internacionalización del jazz español.