concierto de año nuevo. Una vez más, y ya van 80, la Filarmónica de Viena saludó el Año Nuevo con su tradicional concierto, en el que esta vez los tradicionales valses de los Strauss hicieron por primera vez hueco a Beethoven, y en el que el fin de fiesta de la Marcha Radetzky sonó limpia de reminiscencias nazis. El director letón Andris Nelsons, que se estrenó con éxito en la tarea de conducir desde el atril este saludo al 1 de enero, cumplió su deseo expresado unos días antes de "compartir con la gente la alegría" y empezar el año con algo positivo. Foto: Efe