granada. El festival Parapandafolk, que tiene lugar en la localidad granadina de Illora, ha dedicado su última noche a la música vasca, concretamente a las txalapartas de piedra y palo de OrekaTK y al quinteto vasco-francés Xarnege, poniendo así fin a cuatro días de conciertos, exposiciones y talleres por los que han pasado cerca de 10.000 asistentes.

Así, según ha informado la Diputación de Granada en un comunicado, la entrega final de la 22 edición de este festival la abrió el pasado sábado el quinteto Xarnege, que toma la denominación de los hijos de matrimonios mixtos entre vascos y gascones.

Los propios componentes han explicado que aunque en ocasiones se le dé un tinte peyorativo al término, ellos han tomado el lado "más amable" del vocablo. "Sharnègo es quien conoce y ama las dos culturas, quien es capaz de expresarse y afirmarse de dos formas", han expresado.

Simon Guillaumin y la multiinstrumentista Lucia Longué llevaron además todo el peso visual del concierto con sus duetos instrumentales, vocales y sus animosas persecuciones por el escenario pero, en esta ocasión, en los bises se añadieron los dos Orekas cuyo burbujeante instrumento (la txlaparta es como un vibráfono pero de piedras o troncos afinados) suma tanto a la músicas tradicionales como al blues, el jazz o el rock.

Hay que tener valor para cruzarse el planeta arrastrando palos y piedras, pero Harkaitz Martínez y Mikel Ugrat lo han hecho, y es ese viaje la base de su actuación.