Si la batalla en la zona alta de la clasificación de la ACB está apretada, por la parte baja están saltando chispas. A falta de solo tres jornadas para que termine la liga regular, siguen sin conocerse los nombres de los dos equipos que dejarán la máxima categoría del baloncesto estatal y todos los que están inmersos en la pelea se niegan a dar su brazo a torcer. Con solo una victoria de diferencia entre el Urbas Fuenlabrada, actual colista, y el Casademont Zaragoza, decimotercer clasificado, es difícil aventurarse a hacer una predicción sobre quiénes estarán en LEB Oro el próximo curso, máxime si se tiene en cuenta que todavía quedan dos duelos directos por disputarse.
En estos momentos, son tres los equipos que están empatados en la cola de la clasificación con 10 victorias y 22 derrotas: Hereda San Pablo Burgos, Morabanc Andorra y Urbas Fuenlabrada. Los dos primeros se metieron de lleno en la pelea la pasada jornada al derrotar respectivamente al Unicaja y al propio Andorra, duelo este último causante de que la tabla se haya apretado tanto. Por delante, con un triunfo más y al filo del abismo están el Casademont Zaragoza, el Monbus Obradoiro y el Coosur Real Betis. Todo puede ocurrir en los dos partidos que restan, aunque los compromisos de esta noche comenzarán a arrojar luz al asunto.
El Fuenlabrada intentará abandonar la cola de la clasificación en su casa frente a un Breogán con pocas opciones ya de entrar en el play off. De no conseguirlo, se tendría que jugar el todo por el todo en la última jornada en un duelo no apto para personas con problemas cardíacos a domicilio contra el Hereda San Pablo Burgos.
La misma tensión se vivirá hoy a las 20.30 horas en el Pabellón Príncipe Felipe con el Casademont Zaragoza-Morabanc Andorra. Un triunfo local supondría la salvación matemática del conjunto maño, pero una derrota los pondría en una situación muy comprometida y ante la posibilidad de descender de la ACB a LEB Oro por segunda vez en su historia y romper una racha de once años seguidos en la máxima categoría. Para el Obradoiro también supondría un duro golpe tras diez años consecutivos en la ACB, mientras que otro histórico como el Fuenlabrada regresaría a LEB Oro 16 temporadas después. Dos jornadas, seis equipos y solo cuatro plazas en ACB. La batalla está servida.