El barrio de Aranbizkarra de Vitoria se despertaba este viernes con una triste noticia, el fallecimiento de uno de sus referentes para cientos de vecinos de la zona. María Josefa Fernández de Gamarra, más conocida como Mari Pepa, ha fallecido a los 91 años.

Detrás del mostrador de un pequeño comercio del barrio, a diario desde la década de los 60 (concretamente desde el año 1964), Mari Pepa era recordada hoy con nostalgia por muchos de los clientes de toda la vida, que se han visto sorprendidos al ver la mercería cerrada y la esquela puesta en el escaparate, y quienes destacaban sobre todo el trato personal que recibían cada vez que llegaban a la tienda.

Ubicado la calle semipeatonal Senda de los Canónigos de Aranbizkarra, María Josefa había estado al frente de la Mercería Mari Pepa a diario, hasta que su hija Ana tomó el relevo hace unos años, y es la que continúa llevando las riendas del negocio.

Un pequeño comercio que desde la década de los 60, tal y como recuerdan los vecinos del barrio, ha atendido durante años a cientos de clientes, pasando incluso por aquí hasta tres generaciones. "Mi madre y mi abuela ya venían a Mari Pepa a comprar ropa interior, medias, calcetines y pijamas, ropa de bebé, y ahora yo sigo viniendo", recuerda Clara Martín, mientras leía la esquela en el escaparate.

Con clientela fiel y de toda la vida, esta mercería tradicional se convierte en todo un referente cuando llegan fechas señaladas como cumpleaños, Navidades y Reyes. Y es que muchos vecinos del barrio llegan hasta Mari Pepa en búsqueda de un regalo para dejar en el árbol de Navidad.

Retos de las tiendas pequeñas de barrio

El pequeño comercio de los barrios de Vitoria, que se ve obligado a competir con las grandes superficies y las ventas online, ha tenido que hacer frente a otro importante reto, como ha sido el confinamiento por la pandemia.

Por lo que las pequeñas tiendas necesitan del apoyo incondicional de los vecinos del barrio, que creen en ellos y potencian sus negocios comprando en ellos.

Goian bego.