La apuesta por crear un nuevo matadero de gestión privada en la comarca vizcaína de las Encartaciones, hecha pública desde diversos cargos políticos, no ha sido bien recibida desde las personas del sector primario que llevan movilizándose y recogiendo apoyos en contra de la clausura del matadero municipal de Llodio.

De hecho, el movimiento SOS Baserriak, uno de los presentes en la multitudinaria manifestación en defensa del futuro de la comarca, ha iniciado una nueva linea de trabajo que, ademas de la dignificación de las condiciones de trabajo en el sector primario, tendrá como objetivo la reapertura de esta infraestructura o la instalación de un nuevo matadero en Aiaraldea que cumpla con tres criterios muy concretos.

El primero de ellos es que la inversión pública tiene que estar sujeta al control público, porque "son muchos los proyectos que todos conocemos que después de embolsarse el dinero publico se han dedicado a devaluar el sector", matizan. El segundo es que el nuevo matadero tiene que estar ubicado en Aiaraldea. "No nos oponemos a que se haga otro en Enkarterri, pero Aiaraldea no puede volver a ser otra vez la gran olvidada", subrayan; al tiempo que añaden como tercer requisito que "el nuevo matadero tiene que responder a los intereses del sector y de la ciudadanía, no a los del mercado y sus empresas", inciden, animando a todas las personas que compartan estos objetivos a que se sumen a SOS Baserriak.

Reconociendo la necesidad imperiosa de un matadero en las inmediaciones, "no creemos que la pérdida de capacidad productiva para la comarca sea motivo de alegría", subrayan desde SOS Baserriak, cuyos integrantes consideran que "faltan a la verdad" cuando aseguran que el proyecto de Encartaciones ha sido el único que se ha presentado hasta ahora.

"La Plataforma Hiltegia Ez Itxi se ofreció a gestionar las instalaciones de Laudio y su propuesta ni siquiera fue tenida en consideración por ninguna administración. Seguramente si a Hiltegia Ez Itxi le hubiesen dado las mismas facilidades también habría sido capaz de presentar un proyecto", subrayan desde el movimiento.

Además, SOS Baserriak tampoco cree que, "tal y como dice el señor diputado de Agricultura, la iniciativa privada vaya a ser capaz de mejorar la eficiencia y estructuras existentes, equilibrar la oferta y arrastrar la economía del sector ganadero, cuando el Matadero Municipal de Llodio ha sido de propiedad pública pero de gestión privada.

Desde SOS Baserriak aportan el dato de que el gestor que está liderando el proyecto en Enkarterri "es el mismo que gestionaba las instalaciones de Laudio, gestor del que por cierto nosotros no tenemos ninguna duda sobre su buen hacer, pero del que parece ser las diferentes administraciones por lo declarado hasta ahora sí", matizan. El movimiento sí ve más factible que "una estructura de sacrificio sin control público siga arrastrando hacia la ruina absoluta a la economía del sector ganadero".

El movimiento cree que el matadero de Encartaciones no es el que las baserritarras y las consumidoras de Aiaraldea necesitan. "Es un parche que alguien se ha sacado de la manga a falta de un año para las elecciones municipales y forales". En este sentido, para considerar que el nuevo proyecto responde a las reclamaciones del sector y la ciudadanía, SOS Baserriak necesita que se garantice que la participación pública esté respaldada con los adecuados mecanismos de control, y que este enclavado en Aiaraldea: "No se trata de que se encuentre más cerca o más lejos, esto no es un problema de comodidad de las personas baserritarras tal y como nos han echado algunos en cara, se trata de que la comarca disponga de los recursos necesarios para hacer frente a su futuro", puntualizan.

Asimismo, piden que el nuevo matadero responda a las necesidades de las personas baserritarras y consumidoras, y para esto "el nuevo proyecto no tiene por que convertirse en un agente más de la cadena de valor, tiene que garantizar los servicios necesarios para que la producción local se pueda consumir en el entorno". l