Sesenta días de trabajos a la comunidad por pegar a su madre

El suceso tuvo lugar la noche del 28 de septiembre de 2015 en la vivienda en la que ambos convivían junto a otra hermana del condenado y en la que la sentencia indica que existía una “situación conflictiva familiar mediada por conductas violentas por parte de todos los miembros de la familia, con insultos y descalificaciones mutuas”. La Fiscalía pedía para el acusado medio año de cárcel y alternativamente 60 jornadas de trabajo en beneficio de la comunidad por un delito de maltrato familiar, ya que incluso estaba acusado de golpear a su madre con una botella en la cabeza.

La sentencia establece, sin embargo, que no ha podido acreditarse la agresión con la botella, pero sí que la mujer presentaba lesiones en distintas partes de la cabeza, manos, brazos y hombros propias de un “violento zarandeo” y se apoya en el parte médico elaborado en el hospital vitoriano donde fue atendida. El juez afirma que ha quedado demostrado que el encausado, de 33 años cuando ocurrieron los hechos, utilizó una “violencia injustificada con su madre y que lo hizo con intención de menoscabar su integridad”. Además de los 60 días de trabajo en beneficio de la comunidad por un delito de agresión con lesiones leves, el juzgado le prohíbe acercarse a su madre a menos de 200 metros y comunicarse con ella durante un año y medio.

azuzar a los perros También en el Palacio de Justicia de Gasteiz, un juez ha condenado a medio año de cárcel a dos hombres por azuzar a sus perros, catalogados de raza peligrosa, contra dos agentes de la Ertzaintza a los que también agredieron cuando éstos les conminaron a atar y poner el bozal a los canes.

La Fiscalía pedía para ambos dos años de cárcel, pero durante la vista oral el pasado 12 de mayo se llegó a un acuerdo de conformidad y la Fiscalía modificó su petición de pena que fue aceptada por los acusados, por lo que el juzgado ha redactado una sentencia en ese sentido.

Los hechos declarados probados tuvieron lugar durante la mañana del 29 de junio de 2015 en un parque junto a la calle Antonio Machado de Vitoria cuando los agentes observaron que había un grupo de cuatro hombres que tenían a sus perros peligrosos sueltos y sin bozal, y además los estaban azuzando.

Cuando los ertzainas se acercaron a ellos para informarles de que debían llevar los perros atados y con bozal, uno de los acusados les espetó que “no tenían ni puta idea” y se inició una discusión durante la cual llegó a golpear con un móvil al agente y se abalanzó contra él cuando logró bajarse del coche policial. El otro agente trató de auxiliarlo, momento en el que el segundo acusado, junto con los otros dos miembros del grupo que no han sido identificados, lo empujaron y golpearon.

Además, los dos procesados azuzaron a sus perros contra los ertzainas y uno de los animales mordió el pantalón y la bota de uno de los agentes. Tras zafarse de los perros, los ertzainas lograron reducir a los dos hombres ahora condenados. El tribunal ha impuesto a cada uno de ellos medio año de cárcel como coautores de un delito de atentado a agentes de la autoridad y que indemnicen de forma conjunta a uno de los ertzainas con 416 euros por las lesiones y daños causados, y al otro con 252 euros. También deberán pagar 246 euros al Departamento vasco de Seguridad por los daños causados en un faro del coche policial.

detenido en gasteiz Por otro lado, la Policía Local de Vitoria detuvo el viernes a un joven de 20 años al comprobar que pesaba sobre él una requisitoria judicial de búsqueda, detención y presentación de un juzgado de Donostia. Los hechos ocurrieron sobre las ocho de la mañana cuando viajaba por Bulevar de Euskal Herria en un vehículo cuyo conductor cometió una infracción de tráfico. Al intervenir con los ocupantes, el agente observó que uno de ellos mostraba una actitud sospechosa por lo que, tras solicitar su documentación y cotejarla con la central de operaciones, se le informó de la requisitoria pendiente, por lo que la patrulla procedió a su detención. - Efe/DNA