Vitoria. Alrededor de una treintena de máquinas quitanieves y 165 personas han trabajado en Vitoria desde primera hora de la mañana para mantener limpias las aceras y los accesos a centros cívicos, al transporte público, a centros de salud y hospitales.El dispositivo de la mañana ha reforzado la labor que habían hecho 12 máquinas durante toda la noche en las calzadas prioritarias de la capital alavesa, en lugares como el casco medieval, así como en cuestas, pendientes y túneles.
Al ser un día festivo, la nieve será recibida hoy por muchas familias en Vitoria como una excusa para salir a la calle a jugar con ella o simplemente para disfrutar del calor de casa mientras se disfruta de la estampa invernal por la ventana.
En las carreteras del territorio la nieve pierde su carácter lúdico para convertirse en un elemento que dificulta el tráfico y que puede ser peligroso, sobre todo combinado con el hielo.
Los problemas para circular han salpicado a la red principal alavesa, concretamente a la AP-1, en Armiñón, que desde ayer por la noche impide el paso de manera intermitente a los vehículos pesados y camiones, ya que la zona de Burgos no está transitable y la Guardia Civil ha pedido a la Ertzaintza que no deje pasar a este tipo de vehículos.
En la red secundaria, esta mañana estaban cerrados al tráfico los altos alaveses de Herrera, Bernedo, Orduña, Salinas y Kruzeta.
Además, era necesario usar cadenas en los puertos de Vitoria, Altube (N-624) y Zaldiaran, mientras que en el alto de la Barrerilla se pedía extremar la precaución por la presencia de nieve y hielo.