vitoria. El PP centra muchas de sus críticas al equipo de gobierno en la gestión económica. Sin embargo, el Ayuntamiento va camino de su cuarto año con acuerdo presupuestario.
Este ayuntamiento necesita gente con capacidad de gestión. Este momento exige que a los mandos de la Casa Consistorial esté gente que entienda de economía, que gestione esto como si fuera una empresa. Y, sinceramente, hay quien no está a la altura para dirigir las Cuentas de la ciudad. La gestión económica del PSE es nefasta. Lazcoz consigue parecerse cada día más a Zapatero.
¿Se refiere a casos como el pago debido de ocho millones al Gobierno Vasco por la obra del tranvía?
Es un ejemplo más. Se le olvidó pagar un dinero que el PP dejó reservado y se lo gastó en otras cosas.
Los debates municipales últimamente están monopolizados por las críticas del PP y las defensa del gabinete Lazcoz. ¿Hasta qué punto están las elecciones ya presentes en la Casa Consistorial?
Nosotros defendemos un proyecto de Vitoria. Y, cuando coincidimos con el gobierno, como en el Plan de Movilidad, en el de Euskera, el soterramiento o el Casco Medieval, lo decimos. Pero en el momento en que no coincidimos, también. El problema que tiene Vitoria está en que el PP es el único partido con opinión propia y que no le dice misa al gobierno. Somos el único partido de la oposición. El PNV sufre su peor crisis institucional desde que tiene representación democrática en Vitoria. Con un PNV fuerte, el capricho del auditorio no estaría amenazando las arcas municipales.
Con el paso esta semana de Malentxo Arruabarrena a la Diputación alavesa, se abre un nuevo escenario para el grupo municipal del PNV. ¿Lo ve como una nueva oportunidad para buscar acuerdos?
Lo que quiero dejar claro es que mi opinión, en lo humano, es muy buena de Malentxo Arruabarrena. Lamento la crisis del PNV y lo mal que se lo han hecho pasar. Del nuevo candidato [Gorka Urtaran] poco puedo decir, porque es tan desconocido... Pero bueno, tengo que recordar que estando en el gobierno he llegado a acuerdos sólidos económicos con el PNV y con el PSE. Y lo volveré a hacer tras las elecciones de mayo.
Llama la atención que PSE y PP se entiendan en el Parlamento Vasco y, sin embargo, en Vitoria el cruce de acusaciones sea continuo.
No se ha trasladado ese clima porque el PSE ha preferido mantener al PNV en la Diputación. Ese PNV que está siendo imputado por casos de corrupción. Será importante que el PP tenga un respaldo importante, que le permita ser la primera fuerza, porque eso dará oxígeno a la política alavesa y municipal. Y espero que los partidos hablen de proyectos concretos. Yo pasé sonrojo cuando Txarli Prieto [dirigente del PSE alavés] puso como condición para apoyar los presupuestos forales que se echara a no sé qué diputado y que, sin saber qué proyectos había detrás, se apoyaran las Cuentas de Lazcoz. Eso es un cambio de cromos puro y duro.
Exigir un cambio en la Diputación para facilitar un entendimiento en el Ayuntamiento también puede entenderse como un cambio de cromos...
Todos los partidos hemos pasado página de aquello. Ahora prefiero centrarme en la necesidad de otro proyecto en Vitoria.
Pese a estar en la oposición, en el Ayuntamiento se habla a menudo de usted. ¿Se ha llegado a sentir el candidato a alcalde a batir?
El único grupo grande en Vitoria con un proyecto alternativo es el PP, y eso irrita a quien no tiene proyecto. Ya sé que se me critica, que se habla de mí mucho más que de otros, pero eso me indica que tengo que seguir defendiendo el proyecto que creo que es bueno para Vitoria. Y tratar de convencer de ello en la calle y escuchar. Creo que, en política municipal, es más útil pasar horas en la calle que en los despachos.
¿En algún momento ha visto peligrar la unanimidad en torno a ser Green Capital europea 2012?
Sólo he visto peligrar la unanimidad sobre la Green Capital cuando al alcalde se le ha visto el plumero. Ha intentado politizar el tema y se ha aferrado a él de una manera ridícula. Pero este galardón se lo han dado a la ciudad, no a él.
¿Quiere decir que Lazcoz se ha querido apuntar un tanto?
Sí, porque no tiene otro que apuntarse. El problema de eso es que la gente tiene memoria. Y recuerda que Lazcoz se cargó a Luis Andrés Oribe [ex director del CEA, que dimitió], que es el impulsor del Anillo Verde. Y, hace unos meses, el gobierno llamaba al Anillo Verde el Anillo Marrón. No se han creído esto del medio ambiente hasta el último día.