La movilidad eléctrica es un hecho y cada año va en aumento. Lo saben bien en ABB, una empresa especializada en electrificación, recarga de vehículos eléctricos, distribución de energía, robótica, automatización, equipamientos industriales y otras tecnologías de ingeniería cuya facturación en este sector no para de crecer. ABB es líder mundial en el área de la carga de VE. Tienen más de 30.000 puntos de recarga rápido (mayores de 50 KW) y más de 350.000 cargadores AC, tienen instalados cargadores ya en 88 países y en total suponen más de medio millón de unidades vendidas de todos sus modelos. Con el conocimiento que le da su experiencia, Álvaro Vázquez, director de ABB E-mobility en España, no duda en reconocer el papel estratégico que tiene Vitoria-Gasteiz en el tema de la recarga eléctrica por su situación - “está muy bien comunicada con las otras ciudades vascas, Logroño, Pamplona, es un eje de paso para el sur y hacia Francia”- y desde el punto de vista energético -“tiene una gran industralización y es más sencillo encontrar potencia en los puntos de carga”-.

Para el director de negocio, ha llegado el momento del despegue de la movilidad eléctrica, lo que lleva al sector a ofrecer un buen asesoramiento a la clientela, implantar puntos de recarga suficientes para satisfacer las necesidades de un mercado creciente y que haya una red que permita a las personas y los/as profesionales moverse con tranquilidad por todo el país. En este sentido, ABB ofrece cargadores que garantizan “alta disponibilidad y versatilidad”. “Cuando nuestros clientes instalan un cargador de ABB saben que el equipo en sí mismo está hecho para durar muchísimos años, que cuentan con la garantía de una gran empresa de más de 140 años, que lo que compran les da lo que esperan y que las inversiones que hagan tengan un apoyo en el tiempo”, asegura. “No se trata solo de un cargador. Se trata de un equipo que está siempre actualizado, monitorizado y disponible. Para que eso suceda, detrás hay un equipo enorme como el nuestro”, sentencia el responsable que destaca que, además de tener un terminal “hay que asegurarse de que funcione”. “La gente quiere cargar rápido, cargar barato cuando lo hace en casa, pero, sobre todo, no quiere sustos, quiere una carga fiable, que cuando se levante en un hotel o vaya a recoger su coche después de haberlo dejado cargando, lo esté”, explica para sentenciar: “ABB siempre ha tenido como base de su negocio que los cargadores deben funcionar todo el tiempo, deben estar monitorizados y los clientes deben saber que el cargador está activo y su coche cargado”.

Necesidades del mercado

El responsable de ABB apunta que la apuesta por las terminales de carga será un punto de diferencia entre las empresas, servicios y territorios. “A medio plazo los sectores profesionales (repartos, taxis, bus, policía...) serán puramente eléctricos y hoy en día los turismos van creciendo con lo que ofrecer la posibilidad de recarga hará que mucha gente se decante por tu servicio frente al de la competencia”. En este punto, Álvaro Vázquez cree importante destacar el papel de las instituciones y los negocios privados a la hora de atraer clientes alrededor de este negocio. “Si Álava en un lugar de paso de mucho tráfico y dispone de muchos puntos de carga, es más fácil que profesionales y turismos se paren en el territorio y vayan al negocio que dispone de la terminal, que irse a un territorio limítrofe. Si yo voy a pernoctar en un hotel, lo haré el que me de la opción de cargar el coche”, reflexiona.

Cuestionado sobre el futuro de la movilidad eléctrica Vázquez tiene claro su crecimiento, pero apuesta por ir un paso más allá. “Hoy está casi garantizado que con un coche eléctrico se puede viajar por España y hay cargadores de alta, media y baja potencia por toda la geográfica. Pero si el número de coches crece más que el de infraestructuras llegará un momento en el que cuando viajemos y lleguemos a un punto de recarga esté ocupado. Por eso estamos pasando de la fase en la que buscamos parar en un lugar en el que haya un punto de recarga, a la fase de parar en un lugar que haya suficientes puntos de recarga en donde voy a parar”, explica.