Viena - El nuevo ministro británico de Exteriores, Jeremy Hunt, alertó ayer de que el tiempo se acababa para lograr un ac uerdo sobre el Brexit y pidió “una solución pragmática” que evit e las “graves consecuencias” de una salida de su país de la Unión E uropea (UE) sin pacto previo. “Estamos muy preocupados porque tal como están las cosas ahora nos dirigimos a un no acuerdo por accidente que tendría un profundo impacto en las relaciones entre Reino Unido y los países de la Unión Europea”, declaró Hunt en un encuentro con la prensa en Viena.
El ministro de Exteriores británico se reunió en Viena con su homóloga austríaca, Karin Kneissl, cuyo país preside este semestre la Unión Europea. “Hay un riesgo real de un divorcio problemático, que sería un enorme error geoestratégico”, insistió Hunt, que apeló a los lazos históricos, a la amistad y a los valores compartidos entre Reino Unido y los países de la Unión Europea para buscar una solución pragmática. “No hagamos de esto uno de esos momentos de la historia de Europa identificado con un enorme error del que se hable en 20 o 30 años, busquemos una solución pragmática que nos permita una amistad especial”, agregó el responsable de la diplomacia británica. Hunt aseguró que la “inestabilidad mundial” hace ahora más necesario que nunca que los países con “los mismos valores” sigan siendo “amigos” y “aliados” pese a elegir caminos distintos.
El ministro británico subrayó que queda “muy poco tiempo” para lograr un acuerdo hasta finales de año y consideró “muy poco probable” que se pudiera ampliar el plazo para lograr un pacto.
Kneissl, por su parte, destacó a los periodistas que la Comisión Europea es el único órgano que negocia el Brexit, en una aparente alusión a unas recientes declaraciones del propio ministro Hunt.
En una entrevista publicada el martes por el diario The Evening Standard, Hunt pidió a los gobiernos de Alemania y Francia que propicien un acuerdo “sensato” sobre el Brexit. La ministra de Exteriores austríaca aseguró que, pese a las divergencias en algunos asuntos entre los países de la Unión Europea, la posición común sobre el Brexit de los 27 es sólida y sin fisuras.
Hunt respondió que el Reino Unido no pretendía “negociar con nadie más que con la Comisión Europea” y reconoció que ese era “el procedimiento normal y legal”.
Tanto el Reino Unido como la Unión Europea quieren acordar un marco para la futura relación bilateral de cara al Consejo Europeo de octubre, pero de momento persisten las diferencias.
Las pesadillas británicas Mientras, en la isla el director general de la Federación británica de Alimentación y Bebidas (FDF), Ian Wright, alertó ayer de que el Brexit se está convirtiendo en un “motivo para tener pesadillas” e instó al Gobierno a explicar las implicaciones para el sector de una salida de la Unión Europea sin acuerdo. Wright sostuvo que no es suficiente que el Ejecutivo de la primera ministra Theresa May prometa emitir documentos técnicos para asesorar a los negocios en el eventual caso de un Brexit sin pacto con Bruselas.
“Los ministros estarían mejor informados si buscaran experiencia de trabajadores de la industria”, opinó el directivo, al tiempo que pidió una reunión con el titular para el Brexit, Dominic Raab, para abordar estas cuestiones. En los últimos días ha aumentado la especulación sobre el almacenamiento de alimentos y productos esenciales en caso de desabastecimiento por un salida del Reino Unido de la Unión Europea sin el necesario acuerdo.
Involucrar al ejército Sobre este extremo, la prensa británica publicó que el Gobierno podría estar sopesando la posibilidad de involucrar al Ejercito para entregar suministros vitales en caso de que un Brexit sin consenso bloqueara los puertos en el Reino Unido y provocara escasez de productos. Sin embargo, esta semana el portavoz oficial de May rechazó esta teoría y aseguró que no tiene planes de implicar al Ejercito en ese escenario.
Por su parte, el director de la Asociación Británica del Sandwich y Comida para Llevar, Jim Winship, recordó esta semana que en el mundo actual “no se almacenan ingredientes”. “Probablemente habrá escasez, particularmente de tomates y lechuga que se compran muchas en España y en Europea, en general”, alertó a la BBC. - Efe
Poco tiempo. Desde el Gobierno británico consideran que “queda muy poco tiempo” para lograr un acuerdo hasta finales de año y consideran “muy poco probable” que se pudiera ampliar el plazo para lograr un pacto.
Desabastecimiento. En los últimos días ha aumentado la especulación sobre el almacenamiento de alimentos y productos esenciales en caso de desabastecimiento por un salida del Reino Unido de la Unión Europea sin el necesario acuerdo.
Bloqueo de puertos. La prensa británica publicó que el Gobierno podría estar sopesando la posibilidad de involucrar al Ejercito para entregar suministros vitales en caso de que un Brexit sin consenso bloqueara los puertos en el Reino Unido y provocara escasez de productos.
Tomates y lechugas. Según un empresario del sector alimenticio, “probablemente habrá escasez, particularmente de tomates y lechuga que se compran muchas en España y en Europea, en general”.