- Los trabajadores de un restaurante de Nueva Jersey, EEUU, no salían de su asombro cuando comprobaron la cuenta de un cliente que les dejó casi 1.000 euros de propina. Según comentó Arnold Teixeira, el dueño de The Starving Artist, el comensal dejó una nota junto al dinero extra. “Muchas gracias por vuestro esfuerzo durante estos tiempos tan duros. A mi familia le encanta venir aquí todos los veranos”, dejó escrito el hombre.
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