BURBANK (ESTADOS UNIDOS). Disney, cuyos ingresos de explotación a través del negocio de televisión por cable bajaron un 23% en el trimestre, busca así captar al público digital que está abandonando la televisión tradicional con una relación directa y no a través de intermediarios, lo que hasta ahora era Netflix para sus contenidos.
"El panorama de medios se define cada vez más a través de la relación directa entre los creadores de contenidos y los consumidores", declaró Robert Iger, presidente y consejero delegado de Disney tras anunciar que la compañía comprará un 42% de la empresa de transmisión de contenidos BAMTech por 1.580 millones de dólares (1.346 millones de euros), elevando así su participación en la misma al 75%.
Tras hacerse con el control mayoritario de BAMTech, Disney pretende lanzar a partir de 2018 un servicio de transmisiones deportivas en 'streaming' bajo la enseña ESPN al que seguirá a partir de 2019 su propio servicio de distribución de contenidos a través de internet bajo la marca Disney, a través del que estarán disponibles las películas producidas por Disney y Pixar, además de invertir en la producción de nuevas series y películas originales exclusivas de este servicio.
"Esta compra y el lanzamiento de nuestros servicios directos al consumidor marcan una estrategia de crecimiento completamente nueva para la compañía", añadió Iger.
Tras anunciar su desembarco en el negocio de servicios de 'streaming', las acciones de Disney registraron un retroceso del 3,72% en el mercado 'after hours', mientras los títulos de Netflix sufrían una caída del 3,83%.
CAE EL BENEFICIO
Asimismo, la compañía del ratón Mickey informó de que en el tercer trimestre de su año fiscal el beneficio neto atribuido alcanzó los 2.366 millones de dólares (2.016 millones de euros), un 8,9% menos que en el mismo periodo del ejercicio precedente.
La cifra de negocio de Disney en el tercer trimestre disminuyó un 0,3%, hasta 14.238 millones de dólares (12.132 millones de euros), con un retroceso del 0,1% de los ingresos por servicios, hasta 12.097 millones de dólares (10.307 millones de euros), mientras que los ingresos por productos bajaron un 1%, hasta 2.141 millones de dólares (1.824 millones de euros).
Por divisiones, los ingresos del negocio de canales de televisión bajaron un 1%, con un retroceso del 3% de la facturación del área de cable, donde el resultado de explotación bajó un 23%.
Por su parte, la división de parques temáticos elevó un 12% su facturación, mientras la unidad de películas facturó un 16% menos y el área de consumo y productos interactivos redujo un 5% sus ingresos.
De este modo, en los nueve primeros meses de su año fiscal Disney obtuvo un beneficio neto atribuible de 7.233 millones de dólares (6.163 millones de euros), un 5% por debajo del resultado del año anterior, mientras su facturación se mantuvo prácticamente estable en 42.358 millones de dólares (36.092 millones de euros).