cien millones de espectadores en 190 países es una cifra que “impresiona”, admiten las actrices de Las chicas del cable, la primera producción española de Netflix, un retrato de la liberación femenina en los años 20 y de las relaciones amorosas entre mujeres. Protagonizada por Blanca Suárez, Nadia de Santiago, Maggie Civantos, Ana Fernández y Ana Polvorosa, Netflix estrena hoy sus 8 episodios en todo el mundo. Retrata cómo fue la integración laboral de las mujeres en los años 20, con el ejemplo de las que entraron en una compañía de telefonía, su enfrentamiento a los prejuicios machistas y su despertar al amor.

Polvorosa y Fernández revelaron que el resto del reparto ya había hablado de la historia de sus personajes durante la promoción de la serie por Europa y Estados Unidos pero ellas tuvieron que estar “mucho más encorsetadas” y no comentar apenas su trama, es decir, su relación lésbica y el trío que forman luego. Carlota y Sara, sus personajes, a priori diametralmente opuestos -la primera una rebelde y provocadora “niña de bien”, la segunda una sufragista y feminista convencida- vivirán una “relación de amor” con un “tercero en discordia”, que interpreta Borja Luna. “Cuando nos contaron un poco la trama la reacción fue qué guay; qué guay que se pueda mostrar esto, qué guay que se hable de un trío y este tipo de temas sólo podría tratarlos Netflix”, explicó Polvorosa, cuyo personaje es “una mujer valiente, luchadora, transgresora, sufragista y feminista”.

Su relación con el personaje de Fernández “se trata desde un punto muy bonito y muy natural y ayuda a que sea todo muy sentimental y muy emocional”. Fernández, que da vida a Carlota -“el personaje más disparatado, muy provocadora, muy rebelde”-, coincide en que, aunque “la trama en sí es provocativa” enmarcada como está en los años 20, la forma en la que la han tratado “no es fea ni obscena”. “Las escenas quizá un poco más pasionales han sido muy hollywoodenses, muy cuidadas, con mucho cariño y delicadeza y nos hemos sentido muy a gusto”, asegura la actriz sobre el romance de estos personajes que se conocen en la ficticia recién nacida compañía de teléfonos en 1928.

La líder de este cuarteto de telefonistas en busca de la libertad es Lidia, interpretada por Blanca Suárez, pero según la actriz su personaje tiene “otras intenciones más turbias” al acceder al puesto. “Ahí se encuentra con su pasado”, adelantó Suárez. Su personaje hará migas con Carlota, y con Ángeles y Marga, los personajes de Maggie Civantos y Nadia de Santiago. La primera es una mujer “que se rige mucho en lo que se debe hacer en su vida”, explica Civantos sobre la más veterana de las telefonistas, una mujer casada que empieza a emanciparse y es víctima de violencia de género. “Las chicas del cable”, dijo, es una serie con “temáticas universales y atemporales” con el siglo XX como escenario. “Victoria Kent aparece en el quinto episodio”, adelantó Civantos, que añadió que están rodando la segunda temporada ya confirmada.

Una serie que llega de la mano de Bambú Producciones a la que da “frescura y luz” Marga, interpretada por De Santiago, que dijo que se trata de una mujer que va del entorno rural a “la gran capital” donde “todo es grande y le desborda”, aunque todo será más fácil con el resto de sus compañeras pioneras.