MADRID. Los usuarios tienen que poder gestionar sus propios datos aunque estén en manos de las empresas, ha afirmado el director de Políticas y Asuntos Públicos de Google en España, Francisco Ruiz, tras destacar el potencial de la información, cuyo procesado masivo con las nuevas tecnologías es muy valioso.
"Se piensa que la gestión exclusiva de los datos es de las tecnológicas, pero no es así", ha insistido en una entrevista con Efe el directivo, en el marco de la conferencia internacional de la Cátedra Google sobre privacidad, la única que tiene esta empresa en el mundo y que acaba de celebrarse en la Universidad CEU San Pablo de Madrid.
El drástico aumento de datos en circulación con internet y las tecnologías cada vez más potentes para analizarlos de forma masiva en tiempo real permiten obtener información a las empresas sobre sus clientes.
Un supermercado, una universidad, una página web: cualquier negocio recoge datos personales de sus clientes sobre los que puede obtener información de sus hábitos, necesidades, gustos, etc., ha explicado el director de Políticas y Asuntos Públicos de Google para España y Portugal.
Negocios tradicionales como los bancos, gracias a las tarjetas de crédito, saben cuándo compran sus clientes, dónde se encuentran en ciertos momentos, qué pagos hacen habitualmente, a qué servicios están suscritos, cuánto consumen en gasolina, etc.
Con las nuevas tecnologías, el valor de la información no se reduce con su uso y puede procesarse repetidamente, es compartida por diversos agentes y muy bajo su coste de almacenamiento, lo que fomenta su utilización.
Sin embargo, "se pone demasiado el foco sobre su uso en las tecnológicas pero todos los sectores recogen datos", ha insistido el responsable de Google, tras destacar el compromiso de su empresa en garantizar que sean los usuarios quienes gestionen su información personal porque "los datos son suyos".
Ha reconocido que en temas de privacidad en Google ha habido momentos en que "quizás no se hayan hecho bien las cosas, y no se nos caen los anillos por reconocerlo", precisa, pero no por falta de voluntad, sino muchas veces debido a la velocidad de los cambios tecnológicos.
En este ámbito de la protección de datos, el directivo ha destacado como principios que rigen su empresa "la transparencia" y "el control" por los propios usuarios de su información, para que sepan qué tiene Google sobre ellos y poder decidir qué se hace con ella o si prefieren borrarla.
Es fundamental facilitar instrumentos a los usuarios para gestionar su privacidad y seguridad digital, ha dicho, como está haciendo Google, con herramientas como la navegación segura, el sistema de detección de anuncios fraudulentos, la verificación de identidades en dos pasos o el Centro de Seguridad Familiar.
Se ha referido especialmente a "Mi Cuenta", que reúne en un solo espacio todas las herramientas disponibles para que los usuarios sepan qué datos tiene Google de ellos y puedan decidir qué quieren hacer con ellos.
Hay que buscar un equilibrio, por supuesto protegiendo el derecho fundamental a la privacidad de las personas, pero sin perjudicar la innovación. "Si rompemos ese equilibrio no tendremos empresas innovadoras europeas", ha matizado.